El pulmón verde del interior de la provincia seguía ayer ardiendo, aunque el incendio estaba acotado y se esperaba poder darlo por controlado hoy. Más de 300 efectivos y 20 medios aéreos trabajaban ayer en este siniestro forestal declarado el domingo en La Torre de les Maçanes, que ha afectado a unas 600 hectáreas y que se cobró en la madrugada del lunes la vida de una segunda persona, un brigadista valenciano que estaba ingresado en el Hospital General de Alicante por las quemaduras sufridas durante las tareas de extinción. Los otros dos brigadistas heridos evolucionan favorablemente y los cuatro quedaron atrapados por las llamas cuando estaban trabajando juntos. Se baraja como posible causa una explosión de aire que pudo alcanzar a las víctimas.
El fuego logró ayer ser estabilizado y perimetrado, sin llamas, tras afectar en una primera estimación 600 hectáreas, pero al cierre de esta edición permanecía sin controlar y activo. La favorable meteorología de la jornada de ayer facilitó los trabajos y de mantenerse esta situación se esperaba que a lo largo de hoy se diera por controlado, con lo que ya no se correría peligro de que las llamas se extendieran por otras zonas. En cualquier caso se trabajaba para sellar y enfriar el perímetro para evitar posibles rebrotes y no se podrá dar por extinguido antes del fin de semana.
En cuanto al conductor del vehículo cuya avería originó el trágico incendio, éste reside en Xixona y tiene una casa de campo en la partida de la Rabosina, donde se produjo el siniestro. Acudió ayer a declarar ante la Guardia Civil, aunque el calidad de testigo, declinando fuentes cercanas a él hacer cualquier tipo de manifestación. La delegada del Gobierno en la Comunidad, Paula Sánchez de León, que visitó ayer La Torre junto con el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, explicó ayer que "se está investigando pero en principio ha sido un accidente", provocado por la avería de este coche, un Renault Kangoo que ardió junto a una zona de masa forestal, por lo que no se cree que derive en imputación alguna. De cualquier forma la Guardia Civil investiga lo sucedido y en la mañana de ayer la Policía Científica revisó el vehículo. Del coche solo quedaba el chasis.
El conseller Castellano fue quien informó en la mañana de ayer del estado del incendio, señalando que aunque la primera estimación es de 600 hectáreas de arbolado, matorrales y cultivos entre Benifallim, Penàguila y La Torre de les Maçanes, la cifra final podría ser menor al quedar dentro de ese perímetro zonas sin quemar. Pero se ha llevado por delante frondosas pinadas de gran valor ambiental. Ayer, la carretera que une La Torre con Benifallim seguía cortada porque se encuentra dentro del perímetro y por la gran cantidad de efectivos en la zona.
Por otra parte dos juzgados de Alicante han abierto diligencias por la muerte de los dos efectivos de extinción, según se informó ayer desde el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad. Por un lado, el juzgado de Instrucción número dos de San Vicente abrió las diligencias por el fallecimiento del agente medioambiental. Este juzgado será el competente para hacerse cargo también de la investigación del siniestro, ya que el municipio afectado forma parte de ese partido judicial. Paralelamente, el juzgado de Alicante abrió diligencias por la muerte del segundo de los miembros de los servicios de extinción cuando se encontraba ingresado en el Hospital General.
Todo apunta que el juzgado se inhibirá al de San Vicente para que se investiguen conjuntamente ambas muertes. Las fuentes consultadas señalaron que la ley obliga a investigar tanto las causas de los incendios como todas aquellas muerte que no hayan sido por causas naturales. De todas formas, desde la Fiscalía se apuntó ayer que por ahora los datos que se conocían apuntaba a que la causa había sido accidental, sin que de momento haya indicios de negligencia.
El siniestro obligó a desalojar más de una treintena de casas de campo, aunque en un principio el fuego no ha llegado a calcinar ninguna salvo daños menores en el exterior, además de evacuar un campamento en Benifallim con 130 niños y la finca de recreo Els Castellans, en La Torre, con 30 niños más, regresando todos con sus padres.
Suspenden Les Festes dels Fadrins
El Ayuntamiento y la comisión de Festes dels Fadrins de La Torre de les Maçanes acordaron ayer la suspensión de las celebraciones, que arrancaron el pasado fin de semana y que tenían su acto principal mañana con la popular Banyà. Los festeros manifestaron su solidaridad con las familias de las dos víctimas, deseando una pronta recuperación a los heridos. Del mismo modo el primer edil de la localidad, Cristóbal Sala, visiblemente afectado por el trágico suceso, manifestó que no era "ético" ni "nadie tiene cuerpo para fiestas después de que haya ardido medio monte y haya dos personas que han perdido la vida tratando de apagar el incendio. Esperamos que los heridos se recuperen pronto". La Torre, Penàguila y Benifallim han declarado tres días de luto y mañana habrá una misa en La Torre por los dos fallecidos. j.a.r.
