Mucho ruido y pocas nueces. Ese puede ser el resumen del partido de ayer en el que el Albacete se llevó los tres puntos del Martínez Valero realizando su fútbol, a pesar de jugar desde el minuto 41 con un hombre menos por la expulsión de Zozulia. Mientras Pacheta cargó las tintas contra el colegiado, Luis Miguel Ramis prefirió apelar al espíritu del grupo de los suyos y sólo vio el penalti cometido sobre Mathías por Gonzalo Villar. Lo cierto y verdad, al margen de justicia o no, es que el Elche fue incapaz de darle la vuelta a un marcador que se puso en contra con un gol con polémica que sacó de quicio a más de uno, incluido a Pacheta, que llegó a la sala de Prensa hecho un basilisco.
A partir de ahí, fue un querer y no poder de los dirigidos por Pacheta, ante un rival que se supo refugiar atrás, que rompió siempre que pudo el ritmo del encuentro y terminó por sacar de quicio al equipo local.
En el minuto 16, un centro chut de Susaeta intentó rematarlo con la mano Acuña, el meta franjiverde se quedó parado y el balón entró dentro de su portería. Todo el mundo interpretó que el gol era del delantero paraguayo, pero el árbitro escribió en su acta que la diana era de Susaeta, que fue el que metió el esférico en el área. Milla Alvéndiz entiende que Acuña no llega a tocar el balón con la mano, pese a su intento, mientras que José Juan hace la estatua. El uno por el otro, el balón en la portería y el 0-1 en el electrónico.
- ¿Hay mano de Acuña en el gol del Albacete ante el Elche o error del meta José Juan?
El Elche, que había comenzado el duelo dominando, tuvo unos instantes de zozobra tras el varapalo, pero enseguida volvió a la carga tratando de enmendar dicho accidente. Además, en el minuto 42, Zozulia vio la roja directa. A pesar de ello, el equipo ilicitano no fue capaz de darle la vuelta al marcador. Lo intentó por activa y por pasiva, pero su fútbol no le dio para cambiar el resultado.
Darlo todo en el campo
El Elche murió en el área de Tomeu Nadal, lo dejó todo en el intento, pero no fue capaz de batir al meta del equipo manchego. Pacheta regresó inicialmente a su once de gala, con Gonzalo Verdú, Josan, Sory Kaba y Javi Flores en el grupo de los elegidos. Trató de manejar el encuentro y metió al rival en su área, que se limitó a hacer su partido y tuvo la suerte del gol.
Con toda cuesta arriba, en la reanudación, el Elche, con dos delanteros centros sobre el campo tras la entrada de Benja, dos extremos y Nino en la media punta, asedió al conjunto manchego durante los últimos 25 minutos, aunque a excepción de un disparo de Iván Sánchez y otro de Nino, ajustado al palo, nunca puso en grandes apuros la portería de Tomeu Nadal.
En este caso, el recurso de Nino, eterno talismán, no valió para romper la línea defensiva de un Albacete cada vez más replegado y que demostró el por qué es la mejor escuadra a domicilio.
El conjunto ilicitano acumuló jugadores en el área en busca del remate, pero los centrales manchegos se mostraron inexpugnables y no dejaron la menor opción a su rival. Además, el cambio de Tekio no ayudó a la hora de romper por bandas y a realizar los desdobles. Tampoco la salida de Gonzalo Villar, que era dueño del la medular, ayudó.
Sin embargo, y tal como sucedió en la primera parte, el Albacete estuvo a punto de sentenciar en su primera llegada al área ilicitana en una acción en la que Mathías reclamó penalti de Neyder Lozano.
Un duro palo para el Elche que suma su segunda derrota consecutiva y llegará a su duelo en Córdoba, tras sumar sólo un punto de los doce posibles. El ruido del gol del Albacete puede tapar todo lo sucedido sobre el campo, pero la Segunda tiene estas cosas.
Lo cierto es que aunque lo puso todo sobre el campo, no fue capaz de ganar un partido que dominó ante un rival con diez durante 49 minutos.
