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Císcar intenta apuntalar la Diputación y le ofrece a Ciudadanos entrar en el gobierno

Miguel Ortiz mantiene el pulso en la Marina Baixa para lograr un escaño - El líder provincial del PP consolida su mayoría en las tres primeras designaciones - El número dos autonómico de C's desautoriza a su diputado y dice que sigue el veto

Los tres diputados en la Vega Baja INFORMACIÓN

Con una mayoría que empieza a ser clara dentro del grupo del PP a pesar de que por ahora Miguel Ortiz le aguanta el pulso en la Marina Baixa, el líder provincial de los populares, José Císcar, quiere apuntalar el mando de la Diputación y está resuelto a ofrecerle a Ciudadanos un acuerdo que, incluso, pueda facilitar su entrada en el gobierno. Císcar se muestra convencido: debe abrirle la mano a Fernando Sepulcre, único diputado provincial de Ciudadanos y que se ha mostrado receptivo a mantener abiertas las vías de diálogo, para cerrar un acuerdo que, en todo caso, sigue a expensas del caos y el descontrol que se vive dentro de la formación de Albert Rivera. De hecho, a través de una nota de agencia, el número dos autonómico de Ciudadanos y exUPyD, Alexis Marí, aseguró, desvelando una conversación privada entre Carolina Punset y Alberto Fabra, que el veto a Císcar continúa con lo que, de facto, desautorizó a Sepulcre. La cúpula provincial asegura que Génova tiene cerrado el acuerdo con la dirección nacional de Ciudadanos en Barcelona, que guarda silencio en medio de la bronca interna.

Una vez resuelta la elección en la comarca de l'Alacantí con la designación de José Císcar como aspirante del PP junto a Alejandro Morant y Sebastián Cañadas, las tres primeras votaciones de diputados se cerraron sin oposición y con mayoría para los candidatos que, al menos en primera instancia, respaldan al exvicepresidente de la Generalitat como aspirante al Palacio Provincial. El alcalde de Calp, César Sánchez, fue elegido en la Marina Alta después de la retirada del hasta ahora diputado Ximo Ferrando, que dejó vía libre con la petición de un acuerdo de «integración»; Eduardo Dolón, el oriolano Paco Sáez y Adrián Ballester serán los representantes de la Vega Baja después de que el sector crítico no lograra ni tan siquiera reunir avales para plantarles cara; y Javier Sendra, alcalde de Planes, repetirá como diputado del PP por l'Alcoià tras la renuncia del primer edil de Beniarrés. Tanto César Sánchez como Eduardo Dolón están entre los nombres que figuran como «plan b» de los populares en el caso de que José Císcar se acabara retirando.

Los movimientos en el resto de comarcas apuntan a una mayoría clara de Císcar en el grupo popular. Quedan por elegir el partido judicial de Villena, en el que saldrá el primer edil de La Canyada, Juan Molina, que, a diferencia del resto, no es de los incondicionales del presidente del PP. En Elche están seguros Mercedes Alonso, César Augusto Asencio y Miguel Zaragoza. Y en el Medio Vinalopó, donde se elegirá el jueves, se negocia una opción de consenso que podría pasar por la continuidad del exalcalde de Petrer, Pascual Díaz. Continúa el pulso en la Marina Baixa, donde Miguel Ortiz, otro de los «outsiders» al sillón de la presidencia de la Diputación, sigue decidido a ir a las urnas para ganar su escaño. El grupo oficialista, por su parte, de momento, tiene en esa comarca el nombre del alcalde de La Nucía, Bernabé Cano, y el segundo se decidirá en el último minuto para facilitar el acuerdo.

Y, en medio de la bronca del PP, el lío interno de Ciudadanos. El número dos autonómico de C's, Alexis Marí, desautorizó a su nuevo diputado provincial, Fernando Sepulcre, al asegurar que sigue el veto a Císcar. Refirió una conversación «casual» en los pasillos de las Cortes entre la portavoz parlamentaria, Carolina Punset, y el expresidente Alberto Fabra, contrario a la presencia de Fabra en la Diputación. Marí señaló a Europa Press que en el transcurso de esa conversación, en la que primero estaban él y Fabra y a los cinco minutos se unió Punset, le trasladaron al dirigente del PP que, «si insiste Císcar con la Diputación, no la van a tener». Marí descartó que pretendan ser «intervencionistas» con los populares. «Tenemos claro que Císcar no debe ser. No responde al perfil regeneracionista», aseguró. La dirección popular de Alicante se mostró convencida de que, finalmente, Císcar será el presidente y apuntaron que el pacto está cerrado entre Génova y Albert Rivera, que no ha dicho todavía ni una palabra sobre este asunto.

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