Murcia y Sporting B han caído a manos del Elche y, ahora, los franjiverdes se jugarán el ascenso a Segunda División ante el Villarreal B en la tercera y última eliminatoria del «play-off». Tras la victoria del Cartagena (1-0) frente al Celta B, el conjunto departamental se medirá al Extremadura, mientras que los dirigidos por Pacheta tendrán como contrincante al filial del Villarreal, que, en la última eliminatoria, han dejado fuera al Fuenlabrada de Eloy Jiménez. El partido de ida se disputará en el Martínez Valero y, la vuelta, en la localidad castellonense. En la Liga regular, ambos partidos terminaron con empate a cero.
Nino fue el artífice de la segunda eliminatoria y su leyenda sigue creciendo a medida que pasan los partidos. Está a dos encuentros de cumplir su sueño, devolver a su Elche a la categoría profesional perdida la pasada campaña y que le dejó una espina muy profunda.
«Juan Francisco Martínez Modesto Nino». Así rezaba el Twitter de David de Gea, portero de la Selección Española, minutos después de que el colegiado madrileño, Gálvez Rascón, pitara el final del encuentro. El almeriense fue ayer «treding topic» nacional, por detrás de Rafa Nadal, tras su undécimo triunfo en las pistas parisinas de Roland Garros, al convertirse una vez más en el artífice de sacar al Elche de la encrucijada en la que se había metido cuando, en el 76, Cayarga hacía el 1-0 y volteaba la eliminatoria. El 2-1 de la ida se quedaba obsoleto.
Nino, que salió al campo, en el minuto 76, con 0-1 en contra, volvió a ser el salvador del equipo con un gol, en el 86, que daba el billete a los franjiverdes para la siguiente ronda. Dos dianas firmó en la ida y una ante el filial rojiblanco que ya se veía en la siguiente ronda. Mejor cumpleaños no podía tener.
«¿Miedo? No, para nada. Si tienes miedo se agarrotan las piernas y no sacas lo mejor». Señalaba el delantero franjiverde cuando esta semana le pregunté por el partido en Mareo. Son estos retos, como los vividos ayer, los que motivan a este futbolista de 38 años que sigue dando mordiscos como un auténtico bulldog, calificativo con el que lo definía Jorge D'Alessandro.
Nino es eterno y, como bien decía Diego Quiles esta semana, «hay que hacerle una calle o algo más». Su predicamento no parece tener fin a pesar de que en Navidad alguno quiso ponerle el lazo para enviarlo a otra parte. Sólo provocó que la bestia competitiva que tiene dentro el punta de Vera resurgiera como una auténtica Ave Fénix.
El conjunto ilicitano jugó para ganar desde el pitido inicial, pero el fútbol estuvo muy cerca de mostrarse insolente con él. Dice la ley del fútbol, aquella que no está escrita en ninguna parte pero que sale a relucir machaconamente todas las jornadas, que cuando se perdona se acaba pagando y caro. Pero el almeriense salió al campo y obró el milagro y, de esta forma, rompió con la lógica de este deporte que a veces es cicatero con los que lo dan todo en el campo como hizo ayer el Elche. En esta ocasión, el Sporting B se tuvo que rendir ante la evidencia de un equipo, que salvo los cinco minutos después del 1-0, siempre plantó cara y terminó volcándose en el área rival, consciente de que el tren podía pasar de nuevo con Nino como maquinista. Esa constancia y fe en sus posibilidades les llevó a ganar la eliminatoria.
Pacheta, papel fundamental
El otro protagonista principal de la película en tierras asturianas fue Pacheta. Ayer sumó su partido número 15 sin conocer la derrota en el banquillo franjiverde y, lo que es más importante, su equipo crece como la espuma en cada partido que compite. Los errores cometidos un día no los vuelve a repetir al siguiente y, los aciertos, los acrecienta una semana más tarde. El burgalés ha convencido a Nino para que se sienta importante en las segundas partes y asuma ese rol; que Sory Kaba y Benja, que ayer volvió a ser titular, cohabiten, en un mismo grupo y se hagan mejores el uno al otro; que el delantero catalán incluso caiga a banda; que Javi Flores... en suma que el Elche sea un equipo.
Ayer puso a Benja y Josan como titulares, en perjuicio de Sory Kaba y Collantes. Buscaba con el catalán aprovechar la velocidad franjiverde por las bandas e intentar marcar un gol como fuera. Este equipo no podía encerrarse en su campo y esperar a que pasara el campo. Hubiera sido su suicidio.
El Elche realizó una gran primera parte, sabiendo en todo momento a qué jugar y buscando la portería de Dani Martín. Los franjiverdes estuvieron perfectos en el aspecto defensivo, en la medular se logró un gran nivel y sólo faltó un gol para dar un paso adelante en su clasificación. Por banda, Josan empezó desequilibrando por su carril. Es cierto que el filial rojiblanco sabía que con 1-0 lograba su objetivo y trató de no cometer errores. El toma y daca resultó trepidante y el Elche manejó los tiempos del partido y demostró ser un equipo trabajado.
En el descanso las vibraciones eran buenas, pero existía el temor de que el rival metiera una ocasión y tirara por tierra todo lo trabajado.
En la reanudación, tras unos minutos en los que el Sporting B apretó, el Elche volvió a controlar el duelo. Javi Flores, en dos ocasiones, Sory Kaba y, un remate de Gonzalo Verdú al palo pudieron decantar la eliminatoria del lado franjiverde, pero el que marcó fue el conjunto rojiblanco. El mazazo fue tremendo y más de uno pensó que hasta aquí había llegado el Elche en su lucha por regresar a Segunda.
Los ilicitanos tuvieron un pequeño bajón, pero la salida de Nino al campo provocó que los «guerreros» de Pacheta se volvieran a enchufar. El Elche nunca se vino abajo y encontró su premio. El mejor regalo de cumpleaños para el capitán franjiverde, que ayer cumplió 38 años. Al punta andaluz le quedan todavía más balas en su revolver y piensa dispararlas frente al Villarreal B. El último rival en su lucha por regresar a Segunda. Un pasito pequeño, pero, a la vez, muy grande. El Elche tiene a Nino.
