El viejo reloj del siglo XIX de la antigua estación de Benalúa no aparece por ningún lado. La búsqueda en los depósitos municipales ordenada por las concejalías de Cultura y Atención Urbana ha sido infructuosa y la directora de Casa Mediterráneo, entidad que ocupa ahora las dependencias de la vieja estación, dice no saber nada. Ante esta situación, y dado que, según ha indicado el responsable municipal de Cultura, Miguel Valor, se trata de un bien de interés histórico, desde el Ayuntamiento se ha hecho un llamamiento a los ciudadanos «para que quien sepa algo de lo que ha pasado con el reloj llame a la concejalía de Cultura».
Tras comprobar que el reloj no se encuentra en los depósitos municipales, Miguel Valor llamó ayer por la mañana a la directora de Casa Mediterráneo, Almudena Muñoz, para recabar información sobre el paradero del reloj. Aunque cuando ella asumió su cargo el reloj hacía mucho que había desaparecido, la directora señaló a este diario el pasado martes que creía que la esfera se había roto en el tiempo en el que la estación estuvo abandonada, pero que un alicantino se había llevado la maquinaria a su casa para evitar que sufriera más daños. Aunque Almudena Muñoz no facilitó a este diario el nombre de esta persona, sí indicó que creía que se traba de una persona «seria y responsable».
Ayer, sin embargo, Muñoz negó a Miguel Valor saber el nombre del alicantino que se habría llevado la maquinaria a su casa con lo que, a no ser que alguien sepa algo más, la recuperación del viejo aparato parece difícil. Es por esto por lo que el concejal de Cultura ha optado por pedir a los alicantinos que le faciliten la información que tengan sobre el viejo reloj que se instaló en 1888 al tiempo que se inauguró la estación.
Valor señaló ayer que «estamos muy interesados en recuperar el reloj si es que lo tiene alguien. Lo que sí sabemos es que en 2008 ya no estaba. Creemos que se quitó sobre 1990 y poco más, aunque no parece fácil que alguien se lo llevara porque esa maquinaria debe pesar unos 100 kilos».
La incógnita sobre el paradero del viejo reloj ha surgido a raíz de que Casa Mediterráneo haya colocado uno nuevo en el vértice de la fachada donde estaba el original aunque no funciona porque no hay presupuesto para pagar la maquinaria. El viejo reloj desapareció en el periodo en el que las dependencias estuvieron sin uso. La estación dejó de utilizarse como tal en 1982 y permaneció abandonada, deteriorándose y siendo objeto de actos vandálicos hasta que en 2007 se anunció el proyecto de Casa Mediterráneo. Cuando en 2008 empezaron las obras, el antiguo reloj ya no estaba, tal como se puede comprobar en fotografías de esas fechas.
En la elección del actual reloj de Casa Mediterráneo se ha tenido en cuenta el diseño del antiguo, una esfera blanca con las señales de las horas en negro. Las manecillas deberían ser igualmente negras pero desde la institución se ha optado por no ponerlas para no confundir a los alicantinos dado que el aparato no puede funcionar por falta de una maquinaria que costaría unos 3.000 euros.
