Más de siete mil alicantinos han estampado su firma en contra del aumento del precio del transporte público en Alicante "en una proporción exagerada en relación con el índice del coste de la vida aprobado por el Gobierno en noviembre". Así reza en el escrito que, junto a los pliegos de firmas, registraron ayer en el Ayuntamiento representantes vecinales, colectivos de jubilados y pensionistas -indignados por el recorte de los viajes del bono oro-, y sindicatos, quienes reclaman una entrevista con la alcaldesa, Sonia Castedo, para negociar y que "reconsidere la decisión que tomó el pleno municipal con el solo voto de su partido".

Las asociaciones de Juan XXIII, Ciudad Elegida, La Voz de la Florida, Virgen del Remedio, San Nicolás de Bari, Bola de Oro, Nou Alacant, Cuatrocientas Viviendas, San Blas, Gran Vía Sur y Ciudad de Asís consideran que su demanda está avalada por el apoyo de los vecinos "gravemente afectados por la decisión tomada" y por ser entidades de interés municipal que no fueron consultadas pese a que el reglamento de participación ciudadana así lo establece.

Mari Eva Coloma, presidenta de la asociación Virgen del Remedio, calificó de "abusiva" la subida del autobús urbano en Alicante, que "ahora tiene las tarifas más caras de la Comunidad Valenciana". En este sentido, explicó que en Valencia el billete cuesta 1,50 euros, 10 céntimos más que en Alicante, "pero allí los trayectos son mucho más largos y una sola línea de Alicante son dos o tres paradas en Valencia". Sobre el bono oro dijo que también es más ventajoso en la capital de la Comunidad, porque aunque pagan una cantidad fija de 18 euros al mes, los mayores tienen viajes ilimitados.

Coloma también estableció una comparación con Elche, donde cuesta 1,30 tras la recién aprobada subida del 30%, "pero aún así es más barato siendo dos ciudades de similar población y kilómetros de recorrido, además de que tienen bonos mensuales y para estudiantes mucho más económicos". Por todo ello, urgen a que se revise la reciente subida al entender que no guarda equilibrio con la coyuntura que vive Alicante, con tanto paro. "Ya hablamos con Juan Seva -concejal de Transportes- y nos dijo que la situación económica del Ayuntamiento estaba muy mal pero también es crítica la de muchas familias y esperamos que tengan en consideración alguna de nuestras propuestas para bajar los precios". José María Hernández, de La Voz de la Florida, también defendió la vuelta a los antiguos precios del conjunto del transporte público pero considera que el recorte "más gordo" es el del bono oro a los jubilados y pensionistas.

Rectificación

"Lo que se ha hecho es un despropósito total, una chapuza y una falta de respeto a los mayores porque se les ha obligado a hacer cola primero ante las oficinas del TAM y ahora en el Ayuntamiento en pleno invierno. El daño ya está hecho, ahora toca rectificar y dejar el número de viajes del bono oro como estaba". En su opinión, los jubilados alicantinos están sufriendo un agravio comparativo con los de ciudades vecinas. "Además intentan dividirnos y desmovilizar a la gente juntando todos los viajes gratis (144) al principio del año", dijo Hernández.

Manuel Parra, de la Federación de Jubilados, criticó que el recorte del bono oro no se debatiera en el Consejo Municipal de Personas Mayores, que se ha convocado para tratar este tema el día 3 de febrero. Parra no solo pidió que se conserven los 90 viajes gratuitos sino que "se incrementen a 120 ó150. No es disparatado porque hay personas que los necesitan, además de que es miserable estar discutiendo viajes para jubilados cuando se siguen haciendo dispendios no justificados como la pista de hielo".

Representantes vecinales y de mayores registraron también un escrito pidiendo autorización para leerlo en el pleno del viernes.

Pancartas de protesta y apoyo de la oposición

Cerca de un centenar de personas entre representantes de asociaciones y vecinos y mayores que se fueron sumando participaron ayer en el acto de presentación de firmas en contra de la subida del transporte urbano. Algunos de ellos portaron pancartas con mensajes reivindicativos como "Esto es un atraco a los vecinos", "Alcaldesa y concejales en bus", "No al recorte del bono oro", "Queremos lo que teníamos" o "Las asociaciones de vecinos contra la subida abusiva del bus". Los partidos de la oposición también quisieron estar presentes y se sumaron a la protesta, así como los sindicatos UGT y CC OO.