La obras de rehabilitación de la calle Salitre de Callosa de Segura estarán finalizadas el próximo 2 de febrero, tres años y tres meses después de su cierre. Así se lo ha comunicado al Ayuntamiento la empresa concesionaria de los trabajos, la Unión Temporal de Empresas Los Serranos SAU y Heliopol SAU. La empresa ya ha acometido las obras de fijación del terreno y la inyección de hasta 160 micropilotes en la vía pública, que era la operación más costosa y delicada de los trabajos, y ya ha iniciado la segunda fase con la renovación de los suministros de la calle, del saneamiento y de la red de agua potable. Se van a retirar las conducciones de fibrocemento para adaptarlas a la normativa de seguridad y salud actual, a la vez que se va a cimentar el firme de la vía.

Una vez acondicionados los diferentes suministros, quedará como final de los trabajos la consolidación del firme y el asfaltado para la reapertura del tráfico en esta vía pública, que se cerró en noviembre de 2015. La obra, que cuenta con testigos de medición de vibraciones y seguimiento de inclinación de las viviendas a las cuales se reforzó su apuntalamiento, no ha afectado a las casas colindantes de la calzada, según han informado los técnicos desde la dirección facultativa y la dirección de obra.

Acuerdos

De las cuatro viviendas más afectadas, y que tuvieron que ser desalojadas al encontrarse dentro del perímetro de afección de la obra, tres de los propietarios han llegado a acuerdos de responsabilidad patrimonial con el Ayuntamiento a través de su seguro, por lo que en este momento solamente uno continúa litigando en los juzgados la indemnización propuesta.

La Diputación de Alicante confirmó hace tres semanas al Ayuntamiento de Callosa de Segura la consignación de crédito para esta obra, por lo que queda consignada la subvención que se aprobaba en el pleno del pasado 4 de julio, por unanimidad de todos los partidos políticos, en un porcentaje del 75% del proyecto, siendo la ayuda provincial de 332.455,60 euros ante un proyecto que cuesta 443.274,13 euros.

La calle Salitre es una de las principales vías de entrada y salida del municipio al conectar con Redován y Orihuela. Desde su cierre, en 2015, se ha desviado el tráfico por pequeños viales secundarios. Según fuentes municipales, el origen del problema que afecta a esta calle fueron las pérdidas de agua que sufrió la red de la Mancomunidad de Canales del Taibilla, cuya tubería discurría por debajo de esa calle, y las redes de Aqualia, que es la concesionaria del servicio de agua potable.