Un grupo de empresarios de Almoradí ha querido levantar la voz tras esperar nueve meses a que se apruebe el Plan General de Ordenación Urbana en el municipio (PGOU), desde que lo anunció la alcaldesa, María Gómez (PP). Los empresarios, que cuentan con importantes negocios en el municipio, advierten de que este retraso está impidiendo la creación de empleo en un municipio, de poco más de 20.000 habitantes, con una tasa de desempleo del 23%, con más de 2.000 parados.

La falta de suelo industrial, que se aumentaría con el Plan General al ampliarse el Polígono Industrial de las Maromas, es lo que está impidiendo, a juicio de estos empresarios, que empresas interesadas en asentarse en la localidad puedan hacerlo y señalan que, si no se aprueba en los próximos meses, habrá una importante fuga de mercantiles a otras localidades donde sí se puedan expandir. Calculan que se podrían crear unos 700 empleos en el municipio en dos años con el PGOU aprobado al implantarse empresas que actualmente no pueden hacerlo por la falta de suelo adecuado. Además, recuerdan que el Plan General garantiza el medio ambiente al asignar las zonas verdes a cada sector del municipio y la creación de suelo terciario donde se asentarían proyectos de inversión, de hoteles, ocio y entretenimiento. «Suelo terciario e industrial que creará muchos puestos de trabajo y catapultará a Almoradí a dar el salto que, por ubicación, población y características, merece», señalan estos empresarios a INFORMACIÓN.

El urbanismo de Almoradí se rige por unas normas subsidiarias aprobadas en 2003, que recogían la construcción de hasta 24.188 viviendas. Ese año el padrón rozaba los 15.000 habitantes; en noviembre de este año son 20.332 los empadronados en la localidad. El Plan General garantizaría el crecimiento concéntrico del municipio hasta llegar a los 50.000 habitantes.

El actual equipo de gobierno, PP y Cs, tenía previsto sacar adelante el Plan General el pasado mes de abril, y así lo anunció la propia alcaldesa en la comisión de Urbanismo celebrada el 13 de marzo y lo certificó a este grupo de empresarios en una comunicación por correo electrónico, según estas fuentes. Lo más difícil está hecho. Está aprobada la Memoria Medioambiental tras salvar las vicisitudes al tumbar el Consell una anterior propuesta que preveía la recalificación de más de 4,3 millones de metros cuadrados de suelo para construir hasta 11.000 viviendas. Los técnicos adaptaron el proyecto a las directrices que marcó la Dirección General de Evaluación Ambiental y Territorial en 2016. Además, el Ayuntamiento cuenta con el informe del Plan de Acción Territorial sobre prevención de Riesgos de Inundaciones de la Comunidad Valenciana (Patricova). Solo quedaría llevarlo a pleno, señalan estos empresarios quienes lamentan que lo último que saben al respecto es que el 14 de junio la regidora y el jefe de urbanismo presentaron los planos definitivos y explicaron que el Plan General estaba prácticamente acabado, rehusando María Gómez a comprometerse con una fecha para su aprobación a la espera de que los técnicos finalizaran el trámite de gestión.

El Plan General lleva tramitándose desde 2005. Los empresarios señalan que después de más de doce años «no existe motivo aparente» para su no aprobación. «Primero fue su tamaño, a todas luces inadecuado y alejado de la realidad urbanística de la localidad; después la creación de bolsas de reserva de terreno para posibles actuaciones urbanísticas, muy alejadas del casco urbano y con un número de miles de metros cuadrados de extensión absolutamente exagerados; y. más tarde. hubo que salvar la Memoria Medioambiental y el Patricova, y ya se ha hecho, por lo que, a simple vista, todo está encauzado y esperábamos que se llevara a pleno en abril como lo anunció la alcaldesa», explican estos empresarios. Un compromiso que, aseguran, lo reafirmó Cs en el pleno del 3 de abril en el que se aprobaron los presupuestos.

Plan de Acción Territorial

Los empresarios instan a poner ya en marcha esta normativa ya que el próximo año es electoral y el equipo de gobierno no podrá aprobar grandes proyectos, además de que temen que el anunciado Plan de Acción Territorial (PAT) para la Vega Baja de la Generalitat, que va a comenzar a redactar, pueda demorar sine die su tramitación. «Es imposible seguir demorando tan necesaria normativa para el crecimiento de la sociedad, a no ser que haya elementos ocultos de presiones escondidas que hagan que esto no llegue a su fin, ya que todas las dificultades se han salvado y cuenta con el beneplácito de la Generalitat», concluyen, y piden a los gobernantes «que se crean que Almoradí es la ciudad con más posibilidades de crecimiento de la comarca, por su situación privilegiada y sus comunicaciones envidiables, y alejen los fantasmas que se ciernen sobre el PGOU y consigan aprobarlo».

Por su parte, la alcaldesa de Almoradí, María Gómez, explicó ayer que aún no se han terminado todos los trabajos por parte de los técnicos de Urbanismo para llevarlo a pleno y no se atrevió a pronosticar una fecha para su aprobación. «Son trabajos que cuestan mucho y no depende de mí, pero no lo hemos abandonado, estamos trabajando en ello». Además, anunció que «valoraremos también el Plan de Acción Territorial que ha anunciado el Consell para ver cómo se puede incorporar». El PAT prevé proteger 15.000 hectáreas de huerta y atajar el crecimiento urbanístico.