El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, adelantó ayer en una entrevista a Levante TV su decisión de encargar una investigación por los interrogatorios practicados por su responsable de seguridad a personal de confianza del vicepresidente del Consell, José Ciscarinvestigación interrogatorios . La noticia, recogida por INFORMACIÓN el pasado sábado, de que el jefe de los escoltas del presidente inició antes del verano su propia investigación para cazar al supuesto topo que en el pasado habría filtrado información sensible del Palau filtrado información sensible del Palau ha caído como una bomba en el PP. Tal es así, que el presidente ha encargado al conseller de Gobernación, Luis Santamaría, otra investigación para averiguar lo ocurrido y, en función de las conclusiones, tomar medidas.
Los hechos podrían ser muy graves, ya que los interrogatorios se habrían hecho al margen de la Justicia. Además, políticamente evidencian el divorcio entre el Palau y el vicepresidente José Císcar, foco, según las fuentes consultadas, de los interrogatorios. Al menos, un persona de su confianza, su jefe de prensa, Juan Botella, tuvo que someterse durante varias horas a las preguntas del jefe de los escoltas de Fabra.
Aunque el pasado viernes fuentes oficiales de Presidencia se limitaron a indicar que no tenían constancia de estos hechos, Fabra ha decido tomar cartas en un asunto que le salpica directamente, ya que el protagonista es el jefe de sus escoltas, un policía autonómico adscrito a la Generalitat que antes del verano se hizo cargo del grupo de agentes que velan por la seguridad del presidente. La investigación, con todo, la dirigirá su superior, en concreto el jefe de la Policía Autonómica.
