Desde la llegada de Enrique Ortiz en diciembre de 1999, el Hércules no había tenido un organigrama deportivo tan ambicioso como el que posee en estos momentos el Hércules. La presencia de Carmelo del Pozo como máximo responsable de la parcela deportiva junto a la de sus colaboradores Becerra y Varela concede a la entidad blanquiazul un potencial extraordinario para configurar un proyecto que devuelva al Hércules al fútbol profesional de una vez por todas.
La negociación con Carmelo ha sido larga, pero el segoviano ha tratado de asegurarse que tendrá independencia total a la hora de tomar decisiones y que no habrá injerencias de los máximos accionistas en la planificación. Un detalle, el club lo llamó «asesor deportivo y máximo responsable del organigrama técnico» en el comunicado que hacía oficial su incorporación, algo que deja claro que entre él y el consejo no existirá ninguna figura que intermedie en los asuntos deportivos. De esta forma, se aleja la posibilidad de que Portillo regrese al consejo de administración en calidad de asesor deportivo como en un principio estaba previsto.
La presentación de Carmelo se hará más adelante. El club alicantino, en un ERTE por fuerza mayor desde la declaración de la pandemia, había paralizado toda su actividad deportiva y social a la espera de que la situación sanitaria mejorara y, sobre todo, hasta conocer cuándo se iniciará la próxima temporada.
Una vez ha tenido conocimiento de los planes de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) es comenzar el 26-27 de septiembre, el club se ha activado y ha comenzado a definir su nueva estructura deportiva. Tras la llegada de Del Pozo, el siguiente paso en la planificación deportiva debe ser el fichaje de un nuevo entrenador para el primer equipo y, posteriormente, la reestructuración de la plantilla, en la que habrá varias altas y bajas de jugadores con contrato en vigor.
Otro de los puntos por definir será el de la cantera, bajo la dirección de José Antonio Palomino durante los seis últimos años, quien no tiene asegurada su continuidad y todo apunta a que no seguirá en el Hércules.
Carmelo del Pozo, que ya trabajó en el Hércules en la temporada 2011-12 como secretario técnico del entonces director deportivo, Sergio Fernández, se convierte en el tercer máximo responsable de la parcela deportiva del club desde su regreso a Segunda División B en 2014.
El segoviano tomará el relevo de Dani Barroso, quien estuvo al frente de la dirección deportiva durante las tres primeras temporadas y de Javier Portillo, quien lo hizo en las tres últimas. Mucho trabajo por delante y una plantilla por configurar que aspire al ascenso de categoría.
