Acostumbrado a vivir una final cada siete días, la angustia del Hércules. La corriente de aire fresco que azotó para bien el entorno blanquiazul tras la victoria ante el Barça B se difuminó a los cinco minutos de partido en Andorra. Así, subido a una noria de sentimientos encontrados y con la extrema urgencia de verse en puestos de descenso directo a Tercera por sexta semana consecutiva, afronta el Hércules el partido de esta tarde (19 horas, Rico Pérez ante el aguerrido Ebro.
En plena reconversión del propósito marcado hace apenas dos meses, este Hércules diseñado para arrollar en la división de bronce trata de buscar la fórmula para batirse el cobre para huir de una zona impropia e indigna pero que te atrapa por méritos propios. Con la llegada de Jesús Muñoz el Hércules apuntó maneras de equipo feliz, valiente y ofensivo, aunque su mandíbula de cristal y varios errores en cadena le imposibilitaron sumar puntos en Llagostera y Andorra.
El nuevo técnico, que sumará su cuarto encuentro esta tarde, no ha hecho grandes variaciones en cuanto a hombres y dibujo, aunque sí se entrevé la vocación atacante por la que suspiraba Portillo, el hombre que la diseñó y cuyo puesto ya fue puesto en tela de juicio por la afición hace menos de un mes. Nadie se salva de este inicio de Liga tan espeluznante.
El principal quebradero de cabeza del Hércules es, precisamente la que fue su mejor arma el pasado año con Planagumà: su fortaleza defensiva, convertida ahora en una retaguardia de papel. El conjunto blanquiazul ha recibido 14 goles en ocho jornadas y lleva 10 encuentros (sumando los dos últimos del pasado curso) sin conseguir una portería a cero.
El exherculano Stéphane Emaná, dolido con Javier Portillo tras su precipitada salida del Hércules el pasado verano, será la amenaza del Ebro esta tarde. El ariete camerunés se lesionó en febrero la rodilla y fue dado de baja por el club alicantino, que fichó a Benja para reforzar su ataque. Emaná, que finalmente no se operó, había firmado el verano anterior por un solo año con el Hércules y el club decidió no renovarlo al tener en nómina al citado Benja, a Jona y a Carlos Martínez en la parcela ofensiva. El Ebro, entrenado por Manuel Sanlúcar, también cuenta en ataque con Adrià de Mesa, delantero que perteneció al filial del Hércules en la 11-12. El pasado fin de semana anotó uno de los goles de los aragoneses en su victoria ante el filial del Levante.
Samuel, seria duda
La presencia en el once inicial del defensa alicantino Samuel Llorca esta tarde es toda una incógnita por unas molestias en la rodilla, que le han impedido entrenarse con normalidad en los últimos días. El zaguero ha sido cuestionado en las últimas semanas por un sector de la afición, aunque en el vestuario es crucial por llevar el brazalete de capitán. El canterano Olmedo podría ser titular y arrastrar a Álvaro Pérez hacia el centro de la defensa.
Por otra parte, Jesús Alfaro y Diego Benito sí que podrán ser de la partida pese a haber arrastrado diversas molestias musculares durante la semana. El mediocentro madrileño tenía molestias en el tendón rotuliano y el extremo onubense, en el de Aquiles. El alicantino Borja Martínez reaparecerá como titular tras marcar ante el Andorra.
El filial golea (1-3) al Benigànim y recupera plaza en la zona noble
El Hércules B de Antonio Moreno venció con autoridad (1-3) ayer en casa del Benigànim, en la novena jornada de Tercera División. El filial se adelantó con un gol del central Solbes a los seis minutos. La cuenta la amplió el ariete Germán en el 25'. Antes del descanso, Ortuño redondeó la goleada con un tiro desde la frontal y el Benigànim recortó distancias.
