A Compromís le ha tocado cambiar su estrategia electoral. La invisibilidad, por ahora, de los grandes debates autonómicos dentro de la carrera para los comicios del 28-A, el escenario en el que más fuerte se siente la coalición de Mónica Oltra, le obliga a variar su mensaje. El discurso de Compromís se está centrando en reclamar un respaldo suficiente para ser decisivos en Madrid. Es decir, mantener el tipo en las elecciones generales con un discurso claro de defensa de los intereses de la Comunidad para, a su vez, intentar defender con firmeza su espacio en las autonómicas, donde la coalición espera volver a jugar un papel determinante para reeditar el Botànic. Una doble trinchera de autodefensa que Compromís ha cavado en la urna de las generales pero también en Alicante, donde la coalición está desplegando una intensa agenda, incluso, en comarcas castellanoparlantes en las que dispone de una implantación limitada.
Sabedor de las dificultades para «colar» los asuntos de la Comunidad en la agenda de campaña por la coincidencia con las generales, Compromís se agarra a la posibilidad de que sus votos sean imprescindibles para sustentar en España a un gobierno de izquierdas presidido por Pedro Sánchez sin concurso de los independentistas catalanes, ahora mismo una piedra en el zapato de la gobernabilidad. El último barómetro del CIS, a pesar de que solo concede a Compromís la opción de consolidar únicamente dos de sus escaños en Madrid, da alas a esa pretensión. Serían escaños decisivos como parte necesaria de una suma, además de los socialistas, junto a Podemos y el PNV. Ya llevaban varias días con ese mensaje sobre la necesidad de una formación que alce la voz en Madrid, mensaje que se intensificará.
La estrategia diseñada incluye, con el objetivo de defender posiciones electorales frente al voto útil al que aspiran los socialistas, dejar a un lado el intento inicial de «valencianizar» la campaña para posicionar en el centro del debate la infrafinanciación o la falta de inversiones desde Madrid. Pero con cara y ojos: vincular las votaciones en el Congreso para conseguir objetivos con problemas cercanos. El otro mecanismo de autodefensa, la segunda trinchera de Compromís, es ganar terreno electoral en la provincia de Alicante. Ha diluido el discurso identitario y lingüístico en la campaña, ha bajado el tono en temas que le han provocado roces en la provincia de Alicante y levanta la bandera de las reivindicaciones en inversiones y financiación para venderse como la fuerza necesaria para que esta provincia deje atrás la «marginación» desde el Gobierno de España tanto con el PP como también con los socialistas.
Con esta maniobra, Compromís ha dado un giro a su mensaje electoral de cara al 28-A, obviando los temas más conflictivos, para tratar de incidir en la idea de que sus votos son fundamentales y que puede llegar a convertirse en imprescindibles para conseguir el nuevo sistema de financiación para la Comunidad Valenciana en inversiones en la provincia de Alicante. «Si Compromís es decisivo en la formación del nuevo Gobierno de España, o llegan los dineros o con nosotros que no cuenten», repite Mónica Oltra desde hace unos días. «La N-332 se desdoblará si Compromís es decisivo en el Congreso», apuntó ayer el diputado Ignasi Candela durante un acto en Santa Pola. Dos ideas que esconden un mismo mensaje: vender el discurso de que se opondrán a la marginación de esta Comunidad. Incluso con Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, los líderes políticos de la formación han querido posicionarse como la llave para que Alicante y la Comunidad no queden de nuevo relegados.
Es la manera de intentar hacerse fuertes en la urna de las generales para conseguir el mejor resultado posible en las autonómicas y combatir así una doble convocatoria de la que, a priori, no salen desde luego muy beneficiados, como apunta el CIS. Aunque la propia Oltra recordó que Compromís siempre ha funcionado contra «viento y encuestas». Hace cuatro años, casi triplicaron el respaldo que les daba el CIS. En su empeño por afianzar los apoyos que ya tienen y captar a indecisos, Compromís cree que hay una ventana abierta: jugar un papel determinante a la hora de configurarse como apoyo parlamentario de un futuro Gobierno. La coalición ha dejado de lado su cara más ideológica y Compromís, como autodefensa, y ha adquirido una posición más agresiva en su discurso de campaña. Aunque nadie lo cita, de momento, es una estrategia muy similar a la del pragmatismo de los nacionalistas vascos: estabilidad política a cambio de presupuesto. Una minoría valenciana jugando en Madrid.
Marzà «reaparece» con un acto para fomento de la lectura en València
El candidato de Compromís a las Cortes por Castellón y conseller de Educación, Vicent Marzà, reapareció ayer después de haber estado en un segundo plano durante la precampaña electoral. Durante el acto celebrado en València, el conseller del plurilingüismo se reunió con la Fundació Full, vinculada a la promoción de la cultura desde el valenciano, prometió poner en marcha una campaña para fomentar la lectura al alumnado de la Comunidad.
Mónica Oltra pide en el «feudo» de la Marina Alta continuar con el cambio político de 2015
Compromís acudió ayer a uno de sus principales feudos en la provincia de Alicante en la víspera del inicio de la campaña electoral. El acto, celebrado en Dénia, estuvo protagonizado por la candidata de la coalición a la Generalitat, Mónica Oltra, junto a la cabeza de la lista a las Cortes por Alicante, Aitana Mas; el «número uno» al Congreso por Alicante, Ignasi Candela; y el portavoz parlamentario, Joan Baldoví. En su intervención, Oltra incidió en la importancia de su formación, asegurando que Compromís es la «garantía» del cambio político que se inició en las elecciones de 2015. «Hay que favorecer a las personas y no a cuatro poderosos», subrayó la candidata.
Proponen crear un sello de calidad para los mercados locales
La cabeza de lista por Alicante a las elecciones autonómicas del 28-A, Aitana Mas, y el cabeza de lista a las generales por Valencia, Joan Baldoví, anunciaron ayer en el mercado de Xàbia una propuesta programática para diferenciar el comercio de proximidad de las grandes superficies. La intención es hacer un censo de mercados municipales para después crear una marca de calidad, de Mercados Excelentes, que dé pistas a los consumidores y consumidoras sobre si ofrecen productos de kilómetro 0, de proximidad, según anunciaron Aitana Mas y Joan Baldoví en una reunión con representación comercial y ciudadana.
