El incumplimiento de la regla de gasto en 5 millones de euros por la previsión «prudente» de los técnicos municipales en el presupuesto de 2019 por parte del Ayuntamiento de Elche se traducirá en un nuevo recorte para las pedanías. En este caso, Torrellano, El Altet y Arenales se quedarán este año 2020 sin 600.000 euros que estaban inicialmente previstos para la construcción de sus centros socioculturales, ya que de los 300.000 euros que se iban a destinar para cada pedanía finalmente se ejecutarán 100.000 para contratar la redacción de los proyectos.
El incumplimiento en cinco millones de la regla de gasto ha obligado a la Concejalía de Gestión Financiera y Tributaria a presentar un Plan Económico Financiero para 2020 y 2021 con dos medidas provisionales, que primero tendrán que ser aprobadas en el pleno del próximo lunes y posteriormente por la Conselleria de Hacienda, con las que se detrae dinero de diferentes partidas que se considera que no se van a poder ejecutar, como son los 900.000 euros correspondientes a la no ejecución parcial de la oferta de empleo y a la ausencia de servicios extraordinarios derivados de la suspensión de las fiestas de agosto.
La segunda medida, que afecta directamente a las pedanías, supone declarar parcialmente no disponibles partidas de inversiones de la construcción de los centros sociales de Torrellano, El Altet y Arenales. «Este año se habían presupuestado 300.000 euros para la redacción de cada uno de los proyectos de estos centros sociales. Dada la situación causada por el covid-19 y la paralización de los plazos, hemos considerado que no se van a gastar 300.000 euros pero hemos dejado un montante de 100.000 euros en cada partida para iniciar la redacción de los proyectos», explicó ayer la edil Patricia Macià.
La concejala de Gestión Tributaria y Financiera defendió la intervención municipal al destacar que, con estas medidas, se cumple «con las reglas que establece la Ley de Estabilidad Presupuestaria» a la vez que se apuesta por las «inversiones financieramente sostenibles sin subidas de impuestos ni recortes en gasto social ni en servicios públicos». «A pesar de las medidas que nos impone la Ley de Estabilidad Presupuestaria, estamos cumpliendo nuestros compromiso con la ciudadanía», concluyó la edil.
Por otra parte, la Concejalía de Gestión Financiera y Tributaria ya se ha puesto en marcha para elaborar el presupuesto municipal de 2021, por lo que se ha solicitado a los técnicos de las distintas áreas del Ayuntamiento que envíen sus propuestas antes del 1 de agosto, de cara a un nuevo presupuesto que estará muy condicionado por la adjudicación de la contrata de basuras.
Arenales: una obra prometida en 2007 que sigue esperando
El inmueble fue anunciado durante la época de Alejandro Soler y llegaron a trascender los planos del propio edificio
El centro cívico de Arenales del Sol arrastra una maldición desde hace más de una década y ahora ha recibido un nuevo revés, al quedarse este año sin 200.000 euros que tenía adjudicados con motivo del Plan Económico Financiero para 2020 y 2021 que debe corregir el incumplimiento de 5 millones de euros de la regla de gasto en el presupuesto municipal de 2019. El edificio para el uso cultural y social de los vecinos fue anunciado por primera vez en el ya lejano 2007, en los tiempos en los que Alejandro Soler estaba al frente del consistorio ilicitano, y, pese a que llegaron a trascender los planos de cómo iba a quedar el edificio, la obra no se materializó.
La promesa para Arenales que se hizo en 2007 se vio truncada por la crisis económica. Este edificio estaba destinado a permitir la realización de distintas actividades vecinales y el malestar es grande en la zona porque, según denuncias los residentes, inversiones de este tipo se han llegado a hacer a lo largo de la última década en otras pedanías ilicitanas, algunas incluso más pequeñas.
El centro social que se proyectó para Arenales iba a tener dos plantas y 878 metros cuadrados. En el boceto inicial, la planta baja se iba a destinar a consultorios médicos, instalaciones policiales, turismo, OMAC, almacenes y salas multiusos, entre otros, mientras que la primera planta iba a albergar aulas, despachos o salas de máquinas. Ambos niveles, además iban a contar con zonas de espera.
El Ayuntamiento también ha venido reivindicando durante los últimos años los desembolsos que ha realizado en Arenales y que se han traducido, por ejemplo, en mejoras de la red wifi, inversiones en alcantarillado, sustitución de farolas oxidadas, inversiones en las playas o colocación de reductores de velocidad.
