La Generalitat Valenciana ha descartado pedir a la concesionaria del Mercado que busque el refugio de la Guerra Civil, que hay en el subsuelo de la zona, durante las excavaciones arqueológicas que está realizando en estos momentos. Algo que había venido reclamando la Concejalía de Urbanismo al Consell, tras la modificación el pasado año de la ley autonómica que considera que todo el patrimonio de la Guerra Civil tiene consideración de Bien de Relevancia Local (BRL).
Según ha asegurado la Conselleria de Cultura a INFORMACIÓN, el Gobierno valenciano rechaza la petición del Ayuntamiento para que Aparcisa busque y acceda a la galería subterránea que hay en el subsuelo de la plaza de las Flores. València apunta a que las excavaciones que ahora se están realizando «han llegado hasta los niveles geológicos». Es más, según la Administración autonómica, las actuaciones de búsqueda del refugio «quedan fuera del ámbito de las competencias y metodologías habituales para esta disciplina científica», por lo que considera que será necesario un «proyecto de ingeniería, con las medidas de seguridad y salud oportunas, el que establezca el lugar y el modo de búsqueda del refugio en cuestión, siendo ejecutado por una empresa cualificada para ello».
Competencias
Sin embargo, la conselleria dirigida por Vicent Marzà no deja claro si está dispuesta a asumir las competencias de buscar después el refugio, cuyo estado de conservación se desconoce, o si le pasa al Ayuntamiento la «patata caliente», al considerar que el refugio es un Bien de Relevancia Local y por tanto, de competencia municipal.
En cambio, lo que la conselleria dirigida por Vicent Marzà no está dispuesta a hacer, como le pidió el equipo de gobierno, es dar instrucciones mientras sigan las catas, cuya tercera fase se ha reanudado en la plaza de la Fruita. Si esa construcción tiene que protegerse y conservarse, supondría salvar del derribo al Mercado Central y paralizar el proyecto que pasa por construir un aparcamiento subterráneo, donde se construyó un escondite para protegerse de los bombardeos, que nunca se produjeron.
Precisamente, el refugio de la Guerra Civil ha sido una de las bazas de PSOE y Compromís para querer paralizar el proyecto adjudicado por el PP. El otro argumento de los principales socios de gobiernolocal ha sido el informe del Icomos, el consejo asesor de la Unesco, sobre el peligro del parking para el Misteri, que ha acabado precipitando al alcalde, Carlos González, para anunciar una rescisión del contrato.
Protección o documentación
Mientras tanto, la Conselleria está trabajando en la elaboración de un preinventario del patrimonio valenciano de la Guerra Civil, que pretende servir para despejar dudas en Elche, sobre todo, para saber si el refugio del Mercado tiene que documentarse o conservarse. Una vez que se publique este documento, cuyos plazos tampoco ha aclarado el Consell, el Ayuntamiento tendrá que incluir la galería en el Catálogo de Bienes Protegidos y hacer oficial esa declaración de BRL.
La Concejalía de Urbanismo remitió hace un año un informe al Gobierno valenciano con todas las construcciones existentes que componen el conjunto de bienes patrimoniales de la Guerra Civil en Elche. Según el informe, estas construcciones se encuentran concentradas en dos áreas específicas, por un lado el casco urbano y por otro, el Clot de Galvany.
Historiadores e investigadores han cifrado en al menos trece las galerías repartidas en diferentes puntos de la ciudad. La de la plaza de las Flores, justo donde se levantaban los muros de la Pescadería, es el que afecta al Mercado Central. Su entrada, tal y como muestra un mapa elaborado en 1950 que conserva el Archivo Municipal, localiza el acceso en el interior del edificio de abastos. Sin embargo, los técnicos no han encontrado por ahora una entrada visible. Colectivos como Salvem El Mercat han presionado a la Administración local y a la autonómica que busquen la galería, al considerar que Aparcisa no ha excavado a tanta profundidad.
