La alerta por presencia de carabelas portuguesas en el litoral sigue presente. Durante el fin de semana han permanecido cerradas al baño todas las playas de Elche, excepto las de La Marina. Sin embargo, a mitad de la tarde de este domingo un ejemplar de esta falsa medusa ha picado a un niño de 11 años que se encontraba jugando en la orilla, con lo que la bandera ha pasado a ser roja como en el resto de playas ilicitanas.

En el momento de la picadura, la madre del joven ha alertado al equipo de socorristas, que con guantes y mucho tacto han despegado los tentáculos del animal de la piel del niño. El joven ha empezado a sentir varios síntomas como dolor intestinal, con lo cual ha sido trasladado por precaución al Hospital General de Elche, y unas horas más tarde a recibido el alta médica, ya que los efectos de las picaduras eran leves. Se tuvo que trasladar al centro hospitalario porque el consultorio médico de La Marina no presta servicio sanitario los fines de semana, según apuntan desde Ambumar, adjudicataria del servicio de socorrismo y salvamento en las playas ilicitanas.

Es así que la bandera ha pasado de ondear de color verde a roja en este punto, de la misma forma que lo hacen el resto de playas de El Altet y Carabassí, aunque no se han avistado ejemplares a lo largo del día de hoy, y sólo ayer tuvieron constancia de una carabela portuguesa en el Carabassí.

En Santa Pola siguen izadas las banderas rojas a lo largo de las distintas playas y calas. Aunque no han llegado a la orilla, el equipo de Salvamento avistó ayer un ejemplar en la zona del Cabo. Desde el Ayuntamiento señalan que seguirán manteniendo este protocolo hasta que el Instituto de Ecología Litoral les vuelva a informar de algún cambio en las corrientes marinas.