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Pacheta obra el milagro

El técnico burgalés devuelve al Elche a Segunda División tras recuperar a un equipo hundido con la derrota vivida en Ontinyent

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Ascenso Elche CF: imágenes del partido ante el Villarreal B y fiesta sobre el césped

Pacheta tenía un sueño y lo ha cumplido, lograr el ascenso con el Elche a Segunda División. El fútbol tenía una deuda con él y al final la ha podido cobrar porque ha sido capaz de crear un mensaje y de que los futbolistas se lo compraran. Paradojas del fútbol, ayer conoció su primera derrota como inquilino del vestuario franjiverde, 2-1, sin duda alguna se jugó el peor partido de su estancia franjiverde, pero ya ha hecho historia llevando al equipo ilicitano a la categoría perdida hace un año.

En esta ocasión, el protagonismo no fue para Nino, tampoco lo tuvo Javi Flores, sino el meta José Juan. Ya en la ida, detuvo un penalti a Dalmau y, ayer las paró de todos los colores, lo que demuestra una vez más que este Elche ha sido un equipo desde la llegada del burgalés, y, al final, el buen trabajo tiene su recompensa.

Todos se han sentido importantes en el proyecto, incluso los que jugaron menos minutos, porque el preparador de Salas de los Infantes les miró a cada a uno de ellos a los ojos y les dejó claro que la gloria sólo podía conseguirse si todos iban de la mano. La derrota en Ontinyent fue el punto de inflexión.

El último capítulo de la historia resultó complicado como lo había dicho Pacheta: «El que crea que está hecho que no venga». El 2-0 de la ida era un buen resultado, pero ayer el Villarreal B demostró un gran potencial y tuvo contra las cuerdas al Elche durante muchos minutos. En esos momentos de zozobra hubo un poco de todo.

José Juan evitó hasta cuatro goles del rival, algunos de manera increíble cuando ya se cantaba en la grada, los palos se aliaron con los franjiverdes y, se volvió a demostrar que el filial amarillo carece de gol y eso le ha penalizado mucho, tanto en la Liga regular como en la fase de ascenso.

El Elche salió vivo de la primera parte. Comenzó bien, con la lección aprendida obligando al Villarreal B a utilizar los balones largos sobre Rubén. Los centrales, Neyder y Gonzalo Verdú, se anticipaban a los delanteros amarillos y evitaban que el balón llegara al área del meta gallego. Sólo faltaba coger en un renuncio a los pupilos de Miguel Álvarez para sentenciar la eliminatoria.

En esa tarea, gracias a la estrategia, a la salida de un córner, botado por Iván Sánchez, Benja ponía el 0-1 en el marcador.

De esta forma, los franjiverdes lograban su primer objetivo, marcar en el Mini Estadi. Pero, a partir de ese momento, confundieron su fútbol, dejaron demasiado carrete al rival y el filial amarillo comenzó a llegar una y otra vez al área de José Juan. El meta gallego salvó en varias ocasiones a su equipo. No había manera de frenar el vendaval amarillo.

Sobre todo, por banda derecha, el rival llegaba con mucho peligro y Manu se tenía que multiplicar para cerrar la fuga de agua que existía en esa zona del campo.

Sin embargo, Neyder, en una nueva jugada a balón a parado, pudo hacer el 0-2, pero su remate de cabeza se marchó arriba. Hubiera sido demasiado castigo para los locales, que con todo perdido se lanzaron como posesos sobre el área franjiverde.

Tanto fue el cántaro a la fuerte que, en el minuto 44, Rubén lograba el empate y dejaba al Villarreal B con posibilidades de intentar la remontada empujado por una afición local volcada con ellos. El Elche no estuvo inteligente a la hora de intentar llegar con el o-1 al descanso.

En la reanudación, José Juan volvió a lo suyo y evitó que el conjunto amarillo lograra el milagro. Cuando parecía el nivel del Villarreal B bajaba su nivel de intensidad, Provencio fue expulsado y dejó al equipo ilicitano con diez jugadores en el campo, con 15 minutos por delante. Un nueva prueba para los franjiverdes.

No obstante, se fue serio a la hora de defender, la salida de Jony, Josan y Redru, dio el oxígeno, y la llama del Villarreal B se fue apagando. El gol de Rubén, en el 93, ya fue una anécdota ya que no había tiempo para mucho más.

El Elche regresa un año después a Segunda tras una campaña irregular y una espectacular fase de ascenso. Pacheta ha cumplido su sueño de situarse en el Olimpo de los entrenadores franjiverdes que han llevado al equipo ilicitano de Segunda B a Segunda y ya se codea con Ciriaco Cano y Tolo Plaza, que lo estará celebrando desde allí arriba, que lo lograron en Barakaldo y Melilla, respectivamente. Ayer terminó siendo manteado por sus jugadores, que creyeron en él.

Villarreal entra en el libro de la historia del club como ciudad en la que el conjunto ilicitano logra una hazaña. A la localidad castellonense ya se la recordaba con cariño porque en El Madrigal se consiguió de manera virtual el último ascenso a Primera.

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