La buena marcha del mercado nacional y, sobre todo, el aumento de ventas en el resto del continente europeo fueron la clave de la mejora de los resultados que Tempe cosechó el año pasado, en el que la firma participada por Inditex y el empresario ilicitano Vicente García anotó unos ingresos consolidados de 1.317 millones de euros, un 5,6% más, y unos beneficios de más de 113 millones (un 39% más). Unos resultados cuyas grandes cifras ya eran conocidas desde el pasado mes de marzo, cuando el conglomerado de Amancio Ortega las incluyó en el informe que el grupo remite a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, pero de los que se desconocía el detalle.
Hasta ahora, cuando la mercantil especializada en calzado y complementos ha depositado sus cuentas anuales en el Registro Mercantil. Así, según estos balances, el mayor incremento de ventas se produjo en el mercado nacional, donde los ingresos de Tempe pasaron de 188 a 218 millones de euros, lo que supuso un avance de más del 16%.
Del mismo modo, la compañía, que tiene su principal centro de trabajo en Elche, también mejoró más de un 10% su negocio en el resto del continente europeo, donde sumó casi 508 millones de euros, según las mismas fuentes. Por el contrario, las ventas dirigidas al resto del mundo se contrajeron por segundo año consecutivo, al pasar de 600 a 592 millones de euros, un 1,35% menos.
Una evolución que contrasta con la que registran los aprovisionamientos de la mercantil, que es la responsable de diseñar y comercializar todo el calzado para las marcas de Inditex pero que encarga su fabricación a terceros, como señala la firma en sus cuentas. Así, Tempe redujo casi un 12% la compra de mercaderías a sus proveedores nacionales (de 149 a 131 millones) y hasta un 47,1% (de 65 a 34 millones) en el caso de las adquisiciones a productores de otros países de la UE. Unos descensos que compensó sobradamente con el aumento de compras que efectuó a proveedores extracomunitarios, que pasaron de 729 a 827 millones de euros, según estas fuentes.
De esta forma, el calzado y los complementos procedentes de fuera de la UE representaron un 83% del total de compras de mercaderías que realizó la firma en el ejercicio que cerró el pasado 31 de enero -la mercantil escoge esta fecha para sus años fiscales para incluir las rebajas de invierno-, cinco puntos más que el año precedentes. Unas cifras que contribuyen a entender mejor la decisión de la mercantil a principios de este año de hacerse con una parcela de más de 280.000 metros cuadrados en Parc Sagunt, muy próxima al Puerto de València, por donde entran la mayor parte de las mercancías de China y otros países del Sudeste Asiático.
Unos terrenos por los que Tempe desembolsó 31 millones de euros y que debe empezar a operar antes de cuatro años. Eso sí, el desembarco en Parc Sagunt no significa que la firma renuncie a sus proyectos para continuar ampliando también sus instalaciones en Elche Parque Empresarial, donde acaba de finalizar una nueva nave logística de 34.000 metros cuadrados, conectada por un túnel al resto del complejo que ocupa en esta zona.
En cuanto a la distribución de los resultados, que se elevan hasta los 150 millones de euros en el caso de las cuentas individuales de Tempe SA -es decir, sin consolidar las filiales que tiene la firma- los accionistas decidieron destinar 93 millones a reservas voluntarias, mientras que repartirán otros 56,6 millones en dividendos. De esta cantidad, 20,6 millones ya fueron abonados a cuenta antes del cierre del ejercicio, según consta en los balances registrados por la compañía.
Además de la matriz, el grupo Tempe está formado por otras siete sociedades: Tempe Diseño y Tempe Logística, con sede en la provincia; y, en el ámbito internacional, Tempe México, Tempe Trading Asia (Hong Kong), TMP Trading (Shanghai), Tempe Trading SA (Suiza) y Tempe Brasil. Estas dos últimas sin actividad, según los balances depositados por la compañía.
