Reniega de las itinerancias cuando se limitan a mover obra de un lugar a otro sin tener en cuenta el entorno o la evolución del propio artista. Por eso, aunque Daniel G. Andújar (Almoradí, 1966) mostró Sistema operativo en el Centro de Arte Reina Sofía en 2015 y en octubre del pasado año llevó un concepto similar de esa exposición al Centro del Carmen de València, de la mano del Consorcio de Museos, la Virreina de Barcelona y el Reina Sofía, lo que se vio fue otra cosa.

También es distinta la muestra que procedente de la ciudad del Turia se inaugura hoy, 16 de mayo, en las Cigarreras, en la que supone su primera exposición individual en Alicante desde hace casi 20 años (MUA, 2000). Mismo título, Sistema operativo. Colecciones; mismo comisario, Valentín Roma; mismo espíritu reivindicativo; misma revisión de su trayectoria, entre 1989 y 2018, pero diferente espacio -más limitado que el Carmen- y distinta concepción de la obra. Incluso, presentará al público una pieza inédita e incluirá parte del proyecto Democraticemos la democracia, que inició en 2001 precisamente an Alicante.

«Cada exposición es nueva porque no me gustan las itinerancias al uso ya que no participaría yo; eso no tiene interés para mí, lo que quiero es aprovechar que estoy en Alicante para presentar un proyecto nuevo y mostrar los que ya están para ver cómo hablan en este contexto, porque algunos temas tienen que ver con problemáticas que hemos estado viviendo por aquí en las últimas décadas», apunta uno de los creadores españoles más internacionales del momento.

La pieza inédita que mostrará en Las Cigarreras la ha ido desarrollando a lo largo del tiempo para alguna muestra en Alicante. «Es un vídeo que hace referencia a Miguel Hernández y los años 30, en su contexto político de posguerra. Es sencilla y poética, y recupero la única grabación sonora del poeta».

Andújar, que en 2017 presentó su proyecto Los desastres de la guerra en Documenta de KasselLos desastres de la guerra, la exposición más destacada del arte mundial que se celebra cada cinco años, viene a Alicante con esta propuesta que incluye la pieza estrella de ese proyecto, Caballo de Troya. Pese a su trayectoria internacional, Alicante solo ha contado con él para algunas muestras colectivas. «Tenía la espinita clavada de no exponer en Alicante; cuando eres de un sitio tienes muchos más allegados y es otro tipo de acercamiento al trabajo, además es bueno saber de dónde viene uno y poner los pies en el suelo».

Andújar, cuya muestra se podrá ver hasta el 13 de julio, cree que a Alicante «le toca ya reivindicar, si no, no saldremos de esta situación», aunque Málaga no es su espejo. «Estoy en contra de imitar el modelo de Málaga, creo que tenemos que encontrar otro camino; allí son franquicias... ni siquiera estoy de acuerdo con que el IVAM haya abierto una sede en Alcoy antes de desarrollar infraestructuras más apropiadas y adecuadas a su peso específico en la ciudad de Alicante. Y también hay que generar público y, sobre todo, público crítico».

La última parada de la «itinerancia» de Sistema Operativo. Colecciones será en el Virreina de Barcelona en febrero del año próximo, donde también aportará cosas nuevas. Mientras tanto, algunas de sus piezas viajan a Toulouse, Nimes y Arles, ya que Francia conmemora los 30 años del exilio español en el sur del país.