El Ayuntamiento de Benidorm se sentará con la empresa organizadora del Low Festival para intentar renegociar el contrato y reducir los costes que la celebración de este evento genera a las arcas municipales. Así lo ha acordado este mediodía el pleno, tras dar luz verde por unanimidad a una propuesta presentada por el grupo municipal Ciudadanos, que alertaba de presuntas anomalías en las cláusulas actuales de la concesión, en vigor hasta el año 2020.

Entre ellas, el portavoz de C's, Rafa Gasent, ha citado que en el documento no se recoge de manera explícita ninguna indemnización si una de las dos partes decide unilateralmente rescindir el contrato; que el Ayuntamiento asume el pago de los derechos a la Sociedad General de Autores (SGAE), que ha cifrado en 42.000 euros; o que la empresa no esté obligada a asumir los gastos de reparación de los desperfectos ocasionados en la Ciudad Deportiva Guillermo Amor tras la celebración del festival, cuestiones, todas ellas, que a juicio de este grupo político deberían clarificarse en beneficio del interé general. «Ellos hacen un festival que a nosotros nos interesa, pero ellos ganan dinero y a nosotros sólo nos cuesta», ha afirmado Gasent, quien ha defendido que «si las condiciones se pueden mejorar, bienvenidas sean».

Sobre esta cuestión, el portavoz del equipo de gobierno, el popular José Ramón González de Zárate, que cuando se adjudicó el contrato estaba en la oposición, ha destacado que «a Benidorm le interesa el Low, pero al Low también le interesa Benidorm» y, si bien ha defendido la gestión de la promotora, Producciones Baltimore, también ha destacado la viabilidad de «sentarse con la empresa, ver los pros y los contras, e intentar despejar todas las dudas que puedan surgir y todo lo que sea bueno para ambos».

Distinta opinión ha expresado el edil del grupo socialista Rubén Martínez, quien ha recordado que la adjudicación de este contrato, que se llevó a cabo en 2013 por una duración de siete años, «fue polémica en su día desde el punto de vista político», en clara alusión a las dudas mostradas entonces por el PP. No obstante, ha matizado que en todos estos años el Low Festival «ha tenido un innegable impacto económico y publicitario sobre la ciudad» y que, mientras que otros festivales de su nivel en España reciben cuantiosas subvenciones para su celebración -BBK, 1,4 millones; Primavera Sound, 150.000 euros; SOS 4.8, 400.000 euros; o FIB, más de 800.000 en varios conceptos, según sus datos-, el Low no percibe subvención alguna. Por ello, el exalcalde socialista Agustín Navarro, quien promovió que el Low se implantase en la ciudad en 2010, ha pedido al resto de grupos que «estiren la cuerda, pero sin que se llegue a romper» en esta renegociación, que desde el PSOE también han respaldado.

Por su parte, el resto de grupos de la oposición, como Liberales o Ciudadanos por Benidorm, también han puesto sobre la mesa la necesidad de mejorar las condiciones que para el Ayuntamiento supone la celebración del Low, mientras que el portavoz de Compromís-Los Verdes, Josep Bigorra, ha presentado una enmienda para estudiar posibles ubicaciones alternativas para este festival, que finalmente no ha salido adelante por el rechazo mayoritario del resto de concejales.

Gestión de las playas

Otro de los asuntos que ha abordado a lo largo de la mañana el pleno municipal ha sido el referente a la adjudicación del contrato de gestión integral de las playas, que incluye la explotación del alquiler de hamacas y sombrillas; los servicios de salvamento y socorrismo; la limpieza y las playas accesibles. Esto es, dejar todos los servicios en manos de una misma empresa.

Tras varios aplazamientos en pleno, primero por petición de la oposición y después por la presentación de hasta seis recursos al pliego de condiciones ante el Tribunal Central Administrativo de Recursos Contractuales, todos ellos desestimados finalmente, el gobierno del PP ha conseguido sacar adelante la adjudicación definitiva a la misma empresa que hasta ahora gestionaba los servicios, R.A.Benidorm por una amplia mayoría: el propio PP, además de PSOE, Ciudadanos, Ciudadanos por Benidorm y el concejal no adscrito, mientras que Liberales y Compromís-Los Verdes se han abstenido.

Tasa de la basura

Igualmente, el pleno también ha acordado por unanimidad iniciar una revisión de la tasa de basura para hacerla más proporcional. La moción, promovida por el grupo municipal del PSPV-PSOE, ponía sobre la mesa las desigualdades en el reparto del coste de la tasa en lo que respecta a los comedores de hotel y otro tipo de establecimientos, tanto de restauración como comerciales, despachos u oficinas, una opinión que ha sido compartida por todos los grupos. El gobierno local ha logrado, además, incluir una enmienda para que, de cara a la redacción de la modificación de la ordenanza número 17, que regula esta tasa, se cree una comisión en la que estén representados todos los grupos políticos municipales, técnicos de distintos departamentos, asociaciones empresariales y el Consejo Vecinal, para así lograr el mayor consenso.

Por último, también se han sacado adelante otros puntos, como la aprobación del convenio marco para desbloquear la adjudicación de los 22 primeros huertos urbanos ecológicos de la ciudad; la aceptación de la donación de una barca de pesca construida en 1948 por parte del ciudadano Vicente Martínez Rostoll; la creación de una comisión para el estudio de la gestión del ciclo integral del agua; la reposición de 20 plazas vacantes en la plantilla de la Policía Local para obtener autorización del Ministerio de Hacienda; o la creación de una ordenanza para regular las consultas populares en la ciudad, entre otras.