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CORONAVIRUS

El plan del Gobierno para reactivar el turismo indigna al sector por dejar fuera sus reivindicaciones

Los empresarios afirman que no se resuelve el problema de la extensión de los ERTE que solicitan sea hasta final de año - Hosbec reclama además un «bono de vacaciones» que sirva de estímulo a la demanda

La playa de Levante de Benidorm, ayer, con algunos usuarios. david revenga

Indignados y con las expectativas que tenían desinfladas. El sector turístico conoció ayer el Plan de Impulso del Turismo que el Gobierno de Pedro Sánchez y no acabó de convencerles. Primero porque, aunque recoge algunas de sus reclamaciones, les parece «insuficiente» porque no incluye medidas directas y concretas para reactivar el sector este verano; segundo, porque no cuenta con dos de sus reivindicaciones más repetidas: la solución al problema de los ERTE y la petición de los empresarios de que se prorroguen como mínimo hasta final de año.

El presidente del gobierno comparecía ayer para dar las primeras pinceladas del Plan de Impulso al Turismo, valorado en 4.250 millones; unas medidas que el sector lleva reclamando desde hace meses en los que han tenido que bajar la persiana de los negocios turísticos y que llegan con el verano ya encima y a pocos días de que se abran las fronteras. Pero lo que se esperaba como agua de mayo para salvar los muebles, no cumplió las expectativas de los empresarios ya que «no es un instrumento que vaya a resolver los problemas actuales» de este sector, uno de los más castigados por la crisis sanitaria.

El Plan de Turismo se basa en cinco grandes pilares: seguridad, el impulso a la sostenibilidad y la digitalización, la inteligencia turística y la promoción. En el primer punto trata de «afianzar» a España como destino seguro; también, recoge 2.500 millones de euros para una línea de avales del ICO específica para el sector turístico además de incentivos como la reducción de tarifas de aterrizaje de las líneas aéreas o una moratoria de 12 meses en los préstamos hipotecarios, esta sí reclamación de los hoteleros, entre otras medidas. Pero, a pesar de sacar algunos puntos positivos, los empresarios quieren más y, sobre todo, que haya incentivos más directos y concretos para reactivar la economía turística y que se atienda su petición de los ERTEs.

En esa línea es en la que se mueve la patronal hotelera Hosbec, una de las primeras en reaccionar al Plan de Turismo. «Ni resuelve el problema de la extensión de los ERTE en el sector ni plantea medidas de estímulo» al consumo turístico en España, como han hecho otros países europeos. El presidente de la entidad, Toni Mayor, explicó a este diario que «ni es plan ni es nada» y que la mayoría «son créditos ICO que habrá que ver cómo se dan». Para ellos, las medidas se quedan a medias ya que «lo que esperábamos es un estímulo directo al consumidor este verano». Es decir, que el ejecutivo socialista imitara a otros países de la UE como Italia que han dado «bonos de vacaciones» directos a las familias para que puedan viajar y que en algunos casos llegan hasta los 500 euros.

«A la gente que ha estado o está en ERTE hay que estimularla un poco para que viaje pero también a los que han seguido trabajando durante el estado de alarma», añadió Mayor. «Esa teoría es la que no entiende el Gobierno», la del estímulo directo al turista finalista para que pueda hacer este año viajes aunque sean de «4 o 5 días». Pero si hay un punto que se ha reivindicado y no han visto satisfecho es el de la prórroga de los ERTE más allá del 30 de junio. «Es importante que se amplíen hasta final de año» para salvar a muchas empresas del sector y que los trabajadores tengan una mínima seguridad laboral. «El Gobierno vuelve a abandonar una vez más a los trabajadores y empresarios turísticos, sin hacer un tratamiento especializado en un sector de actividad donde existe acuerdo entre sindicatos y organizaciones empresariales para dicha prórroga», añadieron desde la patronal.

En el mismo sentido se pronunció a este diario la presidenta de la Asociación de Hoteles de Alicante, Victoria Puche. «Todos los que han estado presentes le han dicho que la salvación del sector pasa por la ampliación de los ERTE» algo que supondría «balones de oxígeno para respirar hasta diciembre de 2020 o enero de 2021» ya que permitiría ir «sacando» a los trabajadores poco a poco y evitaría que las empresas tuvieran que enfrentarse luego a EREs al no poder recuperar la actividad. «A nadie nos gustan los despidos», añadió, por eso «esa es la salvación del sector» .

A la necesidad de prorrogar los ERTE se sumó también José María Caballé, presidente de la cadena de hoteles Servigroup: «son necesarias acciones más directas sobre todo en cuanto a los ERTEs y la economía de las empresas». Así añadió que «las medidas económicas y políticas se quedan cortas» para un sector cuya situación es «grave» tras el cierre de actividad desde hace meses. «Necesitamos medidas más contundentes», indicó Caballé que añadió que los Expedientes de Regulación Temporal deberían alargarse hasta «la primavera del año que viene» y sumársele medidas para «facilitar la liquidez de las empresas».Con todo, el secretario autonómico de Turisme, Francesc Colomer, se sumó a la reivindicación del sector alegando que «esperamos que los ERTE se prolonguen, como ha pedido el sector insistentemente en este tiempo».

Un plan «insuficiente»

El sector turístico llevaba semanas esperando que se anunciara el tan esperado Plan de Turismo que permita recuperar la actividad y hacer frente a un verano en el que las reservas aún no se han activado y que será complicado para los negocios que, además, encadenan tres meses cerrados y sin actividad. Esas expectativas se vieron ayer truncadas tras conocer el documento que, aunque apoyan en la base, consideran insuficiente. Hosbec lo tiene claro: «no parece que sea el instrumento preciso para resolver los problemas que tiene ahora mismo el turismo español». La patronal alegó que «lo que en realidad han hecho es recoger todo lo que había en diferentes cajones de diferentes ministerios, que ya estaban previstos y programados, aplicarles un barniz o una pequeña capa de maquillaje y presentarlos como un plan».

Para Puche, el documento en el Gobierno «no hay medidas concretas», sobre todo, porque «estamos a tres días del fin del estado de alarma y 15 de que algunos touroperadores vuelen a España y no tenemos nada aún», apuntó la responsable de la asociación alicantina quien concluyo con que el sector «está indignado, esperábamos algo más concreto».

Por su parte, Colomer apuntó a este diario que «lo importante del plan es que exista y que el sector escale peldaños en la consideración gubernamental» y que «lo que necesita es que se le tome de una vez por todas en serio», sobre todo, cuando «peor lo estamos pasando». Así destacó que es necesario la implicación de todas las administraciones para la recuperación del sector turístico en la Comunidad.

Alicante impulsa la búsqueda de fórmulas que den seguridad al turismo

Empresas y universidades investigarán técnicas innovadoras para rediseñar esta actividad económica tras el covid-19

Nuevas fórmulas para garantizar el turismo seguro en Alicante mediante una estrategia en la que participan empresas, universidades e investigadores para rediseñar esta actividad económica ante la crisis sanitaria y proponer soluciones innovadoras. Es el objetivo de la cata «Alicante segura», que inició ayer sus actividades. Un ejemplo de estas nuevas fórmulas que baraja el Ayuntamiento es la previsión de instalar cámaras en el Postiguet a finales de mes para controlar el aforo de la playa y garantizar las medidas de distancia social exigidas por el Ministerio de Sanidad para el verano.

Este foro fue inaugurado ayer por la vicealcaldesa de Alicante y concejal de Turismo, Mari Carmen Sánchez, y el presidente de la Fundación Empresa Universidad de Alicante (Fundeun), Manuel Cazorla, junto a Olivia Estrella, secretaria general de la Agencia Valenciana de la Innovación.

La cata de innovación «Alicante Segura»pretende dar solución a los desafíos que le surjan a las administraciones públicas utilizando las técnicas innovadoras que plantean las empresas y las universidades para obtener la confianza del usuario que demanda tranquilidad en sus desplazamientos.

«Si queremos que Alicante sea competitiva, debemos apostar por la compra pública de la innovación y ligarla a la seguridad, ya que tras la pandemia, el turismo presenta nuevas necesidades», dijo la edil. El presidente de Fundeun señaló que las instituciones públicas lanzan un reto «para el que las empresas innovadoras hallarán resultado». También se diseñarán soluciones para la restauración.

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