Después de tres elecciones en apenas medio año (28 de abril, 26 de mayo y 10 de noviembre), los populares alicantinos ya sabían a qué lugar debían dirigirse para pasar las noches electorales en 2019. No hacía falta que lo preguntasen. Ese conocido restaurante, situado en Vía Parque, fue también el elegido por el PP para otros eventos públicos, como un acto preelectoral a principios de marzo, en el que Luis Barcala, por entonces alcalde y candidato a las elecciones municipales del 26-M, exhibió músculo arropado por 400 personas, entre cargos políticos, militantes y simpatizantes.
De igual manera fue el espacio escogido para un desayuno informativo con Barcala y con Carlos Mazón, «número dos» de la lista municipal, como protagonistas a apenas dos semanas de la decisiva cita electoral y para celebrar las dos últimas comidas de traspaso oficial de poderes de los Reyes Magos del Ayuntamiento, ambas con el popular al frente de la Alcaldía. En una de ellas, de hecho, uno de los cargos de honor, el de Rey Mago, recayó en una persona ligada al grupo empresarial al que pertenece el restaurante preferido por el PP para sus actos públicos.
Ese grupo, que aglutina a empresas como Restaurante Fiesta SA o Restaurante El Sorell SL que comparten administradores únicos y apoderados, ha recibido 19 adjudicaciones a «dedo» por un valor total de 56.120 euros durante los menos de dos años que lleva Barcala como alcalde, según los contratos menores publicados en el Portal de Transparencia del Ayuntamiento de Alicante. Ese mismo grupo recibió cuatro contratos a «dedo» durante los tres años de gobierno del tripartito de izquierdas, que sumaron 5.056 euros, todos ellos relativos al año 2017, como así figura también en el citado Portal de Transparencia.
Es decir, el valor de las adjudicaciones «a dedo» (contratos que individualmente no puede superar el límite de 15.000 euros, más IVA) que el gobierno de Barcala ha dado a este grupo multiplica por once lo que le concedió, sin concurso público de por medio, el tripartito, y eso que el ejecutivo del PP lleva un año menos del que estuvo la izquierda en la Alcaldía de Alicante entre 2015 y 2018.
Entre las 15 adjudicaciones durante la etapa del PP a la sociedad Restaurante Fiesta SA (que tiene como sede social el restaurante El Sorell) destacan el cóctel de una recepción (1.650 euros) y dos vinos de honor (999 y 600 euros) y un «lunch» en el Castillo de Santa Bárbara (1.028 euros), un «coffee break» para una jornada de gobiernos locales (1.386 euros), un almuerzo por un acto de Semana Santa (2.843 euros), junto a un «lunch» para un acto fogueril (3.900 euros), un «catering» para el Día de la Policía Local (600 euros), un «coffee break» para unas jornadas (1.386 euros), un «lunch» para el Día del Voluntariado (4.950 euros), menús para el Día de Todos los Santos (1.039 euros) y lotes de comidas para encargados de la asistencia y custodia de las mesas electorales de las generales y autonómicas del 28-A (15.895 euros), entre otros.
Por su parte, entre los cuatro contratos a la sociedad El Sorell SL en los dos últimos años, según lo que figura en el Portal de Transparencia municipal, resaltan también lotes de comidas para encargados de la asistencia y custodia de las mesas electorales de las generales del 10-N (15.895 euros, idéntico precio que el pagado a la otra empresa del grupo) y un «lunch» para los retenes de seguridad en Nochevieja y Nochebuena (2.904 euros). Relativo a la sociedad El Sorell, figura además un contrato para el montaje de 32 soportes electorales para las últimas generales por 12.705, que sin embargo es un error a la hora de la transcripción de un funcionario, como ayer demostró el gobierno municipal. Ese contrato «a dedo» fue adjudicado a una empresa del sector, alejado de la hostelería.
Desde Alcaldía
A preguntas de este diario, fuentes de Alcaldía afirmaron que el PP ha organizado «pocos actos» en el restaurante El Sorell, subrayando que también celebró otros en campaña en ubicaciones alternativas. En uno de ellos, la asistencia fue muy superior a la capacidad del sitio habitual de los últimos eventos del PP. Desde Alcaldía, en su explicación del significativo aumento de contratos a «dedo» al grupo del restaurante habitual de los populares, añadieron que para la principal adjudicación a «El Sorell se pidió otra oferta, y se le dio a la más barata». Sobre el resto, no precisaron si también se había invitado a otras empresas al proceso. Fuentes del grupo hostelero, por su parte, insistieron en que los contratos son «legales» y que también trabajan con otros partidos.
