El juez que investiga el asesinato de María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala, ha desestimado la petición de la defensa para cerrar la investigación, según el auto al que ha tenido acceso este diario. El caso está pendiente del resultado del análisis por parte de la Policía del teléfono y la tablet del principal sospechoso, Miguel López, yerno de la víctima. El magistrado José Luis de la Fuente ha desestimado las advertencias de nulidad de esta prueba planteadas por la defensa y considera que lo «más prudente» es esperar a que los agentes terminen el análisis de los dispositivos, antes de emplazar a las partes a que presenten sus conclusiones, como reclamaba la defensa. La resolución, que respalda el criterio de la Fiscalía y de la acusación particular ejercida por el primogénito de la víctima, Vicente Sala, no es firme, y contra ella cabe recurso ante el propio juez en tres días.

María del Carmen Martínez murió tiroteada la tarde del 9 de diciembre de 2016 mientras recogía su coche del taller en el negocio de automoción que regentaba su yerno, único investigado por el crimen. Miguel López estuvo en prisión por estos hechos, pero salió en libertad bajo fianza cuarenta días después. López siempre ha defendido su inocencia y se ha desvinculado del crimen.

El abogado Javier Sánchez-Vera, que defiende a Miguel López, denunció que se había vulnerado la cadena de custodia durante la estancia de esos dispositivos en dependencias policiales, por lo que consideraba «superfluo» esperar al resultado de ese estudio y solicitaba el cierre de la instrucción para preparar un escrito en el que iba a pedir el sobreseimiento de la causa para López. El juez instructor le ha respondido que no se aprecia nada de lo alegado por el letrado y considera la petición «una justificación ex post facto del cambio de posición procesal de la defensa» al negarse a facilitar las claves de seguridad para acceder a la nube de los citados dispositivos .

La investigación continuará a la espera del resultado del análisis de ambos aparatos por parte de la Policía. El Ministerio del Interior cuenta con una nueva aplicación que les permitirá desencriptar el iPhone6 y la tablet del sospechoso, algo que todavía no había podido hacer a pesar de contar con la clave de inicio facilitado por el propio Miguel López a requerimiento del juzgado.

Aparatos sin precinto

El día en el que su abogado estaba citado en el juzgado para facilitar las claves con las que acceder a la nube, éste denunció que los aparatos no estaban precintados y que se había vulnerado la cadena de custodia. El letrado planteaba que cualquier prueba que se obtuviera de ese análisis podría estar comprometida por nulidades.

En la resolución, el juez señala que el letrado utiliza estos argumentos para «anticipar la nulidad de un resultado que aún se desconoce de una prueba pericial que está en curso». El magistrado recuerda que en la causa hay numerosos autos de cada uno de los traslados de los aparatos intervenidos en el registro y que «resultaron necesarios a la dificultosa práctica de una prueba pericial por los servicios policiales correspondientes, que informaron en su momento no disponer de los medios técnicos suficientes para el agotamiento de la extracción en aquellos contenida». Esta situación cambió con la adquisición por parte del Ministerio del Interior de una nueva herramienta informática, la aplicación Celebrite, y con la que desde ahora los investigadores podrán desencriptar la información almacenada en estos aparatos.

El magistrado considera «contradictorias y tardías» las objeciones que ahora se han planteado, ya que hasta ahora la defensa había estado presente en todas las comparecencias que se habían celebrado con la prueba pericial informática.