El Ministerio de Fomento se ha propuesto erradicar ocho de los nueve puntos negros que existen en las carreteras alicantinas de titularidad estatal. El Gobierno central ha iniciado los trámites para ejecutar obras en esos tramos de concentración de accidentes y ha empezado a redactar proyectos para reordenar esas zonas o impulsar trabajos de mejora. Así se desprende de una respuesta escrita que el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha facilitado al senador Agustín Almodóbar. El parlamentario benidormense se interesó en la Cámara Alta por los proyectos que había puesto en marcha Fomento para «acabar con la siniestralidad en los puntos negros» de las vías alicantinas. Y ahora acaba de recibir respuesta.
En su contestación, el Gobierno desgrana una a una las actuaciones «más significativas» que ha llevado a cabo o que está impulsando ahora. Una de las zonas más conflictivas durante los últimos años es el punto kilómetro (p.k.) 122,5 de la N-332, en el término municipal de El Campello. Allí existe un tramo de concentración de accidentes -para que se califique como tal han de contabilizarse en él al menos tres siniestros con víctimas en un año- en la intersección de la variante que da acceso a la urbanización «El Amerador». En la zona existe un cruce a nivel conflictivo y ahora Fomento va a reordenar la vía para eliminar esa intersección, próxima también a la vía de acceso a la Coveta Fumà. «Se están disponiendo carriles centrales para permitir giros a la izquierda (...) y suprimir el cruce a nivel», reza la respuesta que el Ejecutivo ha trasladado al senador Almodóbar. En la actualidad se están redactando dos proyectos para reordenar los accesos.
La N-332 es la vía estatal de la provincia con más puntos negros. Junto al de El Campello, existen otros cinco más. Otro, en el p.k. 151,8, en el término municipal de Benidorm. A día de hoy también se encuentra en fase de redacción un proyecto para mejorar la seguridad vial de la zona con la prolongación del carril de incorporación a la carretera en sentido ascendente desde el enlace de Benidorm-Playa Levante. Ese tramo es uno de los más peligrosos de la provincia, según las estadísticas que facilita la propia Dirección General de Tráfico (DGT). Desde su inauguración en 1988 se han contabilizado ya más de 60 fallecimientos.
Muy cerca de allí, en el p.k. 153,3 (l'Alfàs del Pi), el Gobierno central también tiene registrado un tramo peligroso. Sin embargo, es el único en el que no existen «actuaciones previstas».
Mejoras en la Vega Baja
Donde sí las hay es, en esa misma carretera, en dos puntos conflictivos de la Vega Baja. En el p.k. 49,8, en la Zenia (Orihuela), se va a mejorar próximamente el balizamiento y señalización de una glorieta, y se van a instalar paneles y señales luminosas en las que se alertará del peligro. Además, Fomento tiene previsto suprimir los puntos de entrada a la glorieta desde dos accesos urbanos.
Apenas tres kilómetros después, en el p.k. 52,8, el Ministerio también va a iniciar trabajos en la glorieta de Punta Prima. Se procederá a realizar una actuación similar a la de la Zenia: se colocarán paneles luminosos y señales con luces led.
El último tramo de concentración de accidentes de la N-332 es el de la intersección de acceso a Santa Pola, en el p.k. 88. El Gobierno ya ha redactado el proyecto para actuar en la zona con el fin de reducir su peligrosidad.
Los otros tres puntos negros que existen en las carreteras alicantinas que son titularidad del Estado están localizados en la A-77. Dos de ellos pertenecen al p.k 0. Uno es el enlace de las autovías A-70 y A-77. Se ha mejorado la conexión, se ha reafirmado la calzada y se ha ampliado la vía, entre otras actuaciones. Y el segundo tramo conflictivo es la rotonda de acceso a la Universidad de Alicante. Fomento está realizando a día de hoy un estudio, «considerando los problemas derivados del acceso directo al campus».
Y, por último, está el p.k. 0,8 de la A-77, en la glorieta de conexión de la A-77a con la CV-821. Allí se ha mejorado el balizamiento y la señalización.
