El Ministerio de Fomento ha descartado adaptar, definitivamente, los accesos ferroviarios al Puerto de Alicante al ancho internacionaldescartado , lo que dejará a la provincia descolgada del Corredor Mediterráneo en cuanto al tráfico de mercancías, ya que éstas tendrán que seguir utilizando la línea convencional. Una decisión, primero adoptada por al Unión Europea y ahora por el Gobierno, que condena a los muelles a ser un apéndice de Valencia e hipoteca su futuro, ya que las empresas exportadoras seguirán sacando sus mercancías desde la provincia a Europa en camiones por ser más rápidos, pese a que el coste es el doble, debido a que el flete se contrata con tarifa de ida y vuelta aunque el camión regrese vacío. No hay voluntad política y la falta de presupuesto es tal -los fondos de Juncker se quedarán entre Cataluña y Valencia- que el Ministerio de Fomento baraja ahora, incluso, plantear que sean las empresas que trabajan en el puerto las que financien el ya tristemente célebre «tercer hilo» (carril) en ancho internacional entre la terminal ferroviaria del puerto y el corredor.
La falta de operatividad del puerto, que ya perdió diez millones de euros en los últimos cuatro años al estar desenganchado, incluso, del ferrocarril convencional por la prioridad que se dio a la llegada del AVE a Alicante, le dejará en el furgón de cola porque es impensable que se pueda plantear recurrir a llevar el contendor en un tren que saldrá de Alicante pero tendrá que cambiar a otro en Valencia. Ahora mismo, se lleva fruta en camiones a Noruega en 24 horas, apuntan fuentes de las empresas que mueven carga en los muelles alicantinos.
El coste de transportar un contenedor está en 0,9 euros por kilómetro. La falta de un tren rápido para sacar y meter mercancías en el puerto puede, por otro lado, amenazar a la potente plataforma logística que tiene Alicante con Canarias, desde donde se envían los productos que garantizan gran parte del abastecimiento de las islas. Los sectores económicos más perjudicados son el mármol, el juguete, textil, construcción y todo lo relacionado con el envío de suministros a las islas.
La conexión del puerto a la red de alta velocidad quedó plasmada el 7 de mayo de 2003 con la firma de un convenio entre el Gobierno y el Consell. Hoy, todo ha cambiado. Fomento sostiene que la línea no tiene las características geométricas (pendientes del terreno) precisas para el tráfico de mercancías y que el transporte de las mercancías se realizará por la vía convencional, una vez acondicionada según se prevé en el proyecto de implantación del ancho internacional en el Corredor Mediterráneo.
Bruselas ratificó la pasada primavera la inclusión del corredor y el aeropuerto de Alicante-Elche entre los proyectos prioritarios de la red transeuropea de transportes, pero excluyó al puerto por su bajo nivel de tráfico, aunque Fomento sí mantuvo que lo conectaría con la red AVE. Ahora todo salta por los aires y afecta incluso a los plazos del corredor, aunque el ministerio sostiene que se trata de problemas técnicos ajenos al presupuesto.
