El Ministerio de Fomento inició ayer la tramitación (información pública) administrativa para la ejecución del proyecto de mejora de los accesos varios al aeropuerto de Valencia, en concreto la duplicación de la N-220 con una inversión prevista de 71 millones de euros, que, de esta forma, toma la delantera a la actuación para el aeropuerto provincial, que llegó a estar en presupuestos hasta 2010, pero a la que la crisis y el ajuste del Gobierno ha dejado metida en un cajón y con ella los 10 millones que se iban a invertir. Algo que no ocurre con el valenciano de Manises, pese a tener la mitad del tráfico que el aeropuerto alicantino.

La dotación de unos accesos dignos para el aeropuerto es una asignatura pendiente, prácticamente, desde que en 1967 se inaugurara la terminal, y su falta ha agravado la situación con el paso de los años, máxime cuando el aeródromo se ha convertido en el quinto de España y duplica, por ejemplo, en pasajeros al de Manises (Valencia), que el año pasado, el peor de la historia de El Altet, tuvo un tráfico de 4.752.020 pasajeros, por los 8,9 millones de Alicante.

El «lobby» empresarial Ineca y la Universidad de Alicante vienen denunciando desde hace años la urgencia de mejorar los accesos a la terminal urgencia de mejorar los accesos a la terminal(800 millones de euros costó su remodelación), que pasa por ser el peor comunicado con su entorno en toda la franja mediterránea tras el de Marrakech.

La mejora de los accesos viarios al hoy aeropuerto Alicante-Elche se paró en 2010 -Fomento tenía incluso presupuestados los 10 millones de euros para 2011- por el Gobierno del PSOE, pero el actual Ejecutivo popular tampoco ha recuperado el proyecto, al igual que el de la variante ferroviaria de Torrellano -enlace en tren de la terminal con la estación del AVE-.

Para este año se consignaron 257.000 euros en los presupuestos del Ministerio de Fomento, en un apartado denominado «acondicionamiento de la N-338», que es la carretera que conecta la N-332 de la costa con la A-7 pasando por el aeropuerto. Una vía de apenas de 5 kilómetros de longitud, que tiene un tráfico medio diario de unos 26.000 vehículos, con puntas de hasta 40.000 en los meses de julio y agosto.

Las obras consistían en el desdoblamiento de la carretera desdoblamiento de la carreterapara dotarla de tres carriles en cada sentido, y dar servicio tanto al aeropuerto como a IFA.

La N-338 es la única carretera que se puede utilizar para llegar al aeropuerto. Una vía que se muestra insuficiente en épocas de gran movimiento de pasajeros como es la temporada alta turística. La autovía A-7 que lleva a Murcia y a la circunvalación de Alicante está apenas a tres kilómetros del aeropuerto, pero sólo existen dos carriles en un sentido en el acceso desde la N-332. Una carretera, ésta última, que se ha convertido en un «punto negro» para muchos de los pasajeros que llegan al aeropuerto provincial y eligen llegar a Alicante o al sur de la franja litoral por este vial y acceden a él despistados por la falta de información. En Valencia el proyecto prevé la duplicación de la calzada de la N-220 en 2,74 kilómetros y la ampliación de capacidad de la circunvalación V-30 mediante la construcción de tres carriles.