De macrooperación para recuperar la fachada marítima de Alicante a sendero marinero. La consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, asestó ayer un nuevo rejón al proyecto emblemático que llevaba esperando Alicante más de veinte años y al que, definitivamente, le ha pillado el ajuste presupuestario impuesto por el Consell para capear su bancarrota. La consellera, acompañada por el director general de Infraestructuras, Carlos Eleno, anunció que no hay fondos para pagar los 10 millones de euros que cuesta finalizar el túnel de la variante tranviaria de la Serra Grossa, y que el proyecto se quedará, de momento, en la construcción de un sendero entre el Club de Regatas (Tiro de Pichón) y el inicio de la Albufereta para que la gente pueda ir paseando.

Es decir, sólo se ejecutará la primera fase del paseo que debía llegar hasta la playa de San Juan, y reducida a una inversión de unos 600.000 euros -se presupuestó en 4 millones- para salvar el expediente y, por otro lado, se aplazan sin fecha los trabajos en el túnel, básicos para poder ampliar las frecuencias del Tram a Benidorm y las playas.

La consellera Isabel Bonig, que minutos antes había desayunado con la directiva de la patronal de Obra Pública (Fopa) no se anduvo por las ramas y fue sincera. "Nos gustaría hacer muchas cosas pero ahora mismo es imposible pensar en la inversión de 9 o 10 millones de euros para terminar el túnel de la Serra Grossa". El plan Bahía Norte tenía un presupuesto de 36 millones de euros de los que se han gastado 26 millones para nada, ya que ni se puede ampliar el tranvía ni, todavía, caminar por el paseo marítimo, que tampoco llegará hasta la playa del Postiguet, ni de los miradores.

Cronología

La constructora de la variante de la Línea 1 del Tram en la Albufereta (Finca Adoc) acabó en la primavera de 2012, tras diecisiete meses de trabajos, la excavación del túnel de 1.400 metros que atraviesa la Sierra de San Julián (parte de la Grossa frente al mar) conectando el apeadero de Sangueta con la Albufereta. Una obra complicada, extraordinaria por su calidad de ejecución e hito arquitectónico de Alicante al convertirse en el túnel más largo del tranvía. Sin embargo, a la ejecución del proyecto también le llegaron los recortes, y un año después todo sigue bloqueado y los trabajos se limitan a tareas de mantenimiento, según admitió Bonig.

El proyecto que comenzó a ejecutarse en el verano de 2010 tiene un presupuesto de 36 millones de euros y hasta abril de 2012 había cumplido los plazos, pero el ajuste presupuestario impuesto en el Consell le ha pasado factura. Una vez culminada la excavación del túnel, del que se extrajeron 98.000 metros cúbicos (147.000 toneladas de tierra, roca y arenas), falta todavía la instalación de vías, catenaria y electrificación.

Mientras Bonig confirmaba el retraso de la variante de la Serra Grossa y el recorte del proyecto del paseo marítimo, el Pleno del Ayuntamiento de Alicante votaba, con la abstención de EU, instar al Consell a reanudar los trabajos del paseo marítimo.

La alcaldesa, Sonia Castedo, aprovechó la votación de la declaración institucional para criticar la actitud del PSOE. La regidora les recordó que el plan, negociado con Costas, también contemplaba los nuevos deslindes de la Albufereta de cara a salvar las viviendas. Inmuebles ya consolidados tras una modificación de la Ley de Costas que, según Castedo, el PSOE votó en contra en Madrid.

La paralización del desarrollo del tranvía contrasta con la situación en Castellón donde siguen los trabajos para conectar el centro de la ciudad y se ultima la puesta en marcha del tramo al Grao (mar).

Nuevo retraso para la Línea 2 del tranvía

Poco más de un mes después de que la consellera Bonig se comprometiera a poner en marcha la Línea 2 del tranvía (Alicante-UA-San Vicente) para el próximo curso, bien con gestión pública o privada, el culebrón se complica. Ayer, la titular de Infraestructuras no fue tan explícita y volvió a hablar de sus deseos y de que la línea se abrirá "cuanto antes". Bonig recordó las complejidades del pliego de condiciones y espetó que "vamos a intentar que la Línea 2, no está en marcha este año, esté muy adelantada". La consellera explicó que el retraso "es un problema estrictamente económico porque implica una concesión a 20 años y 110 millones de euros que es complicada que la autorice en estos momentos Hacienda". La Línea 2 cumple el mes que viene dos años terminada y probada tras invertir 130 millones en la plataforma y los 14 tranvías almacenados en las cocheras.