La Generalitat Valenciana desconoce si abrirá la línea 2 del tranvía de Alicante (TRAM) bajo la prevista gestión privada o provisionalmente por parte de la empresa pública FGV y, además, si podrá estar operativa antes de que concluya 2013.
Tras un desayuno de trabajo con la Junta Directiva de la Federación de Obras Públicas de Alicante (FOPA), la consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, ha asegurado que quiere abrir esta línea entre Alicante y San Vicente del Raspeig "cuanto antes" pero ha admitido que si a finales de 2013 no ha podido ser inaugurada, al menos estará "muy adelantada".
"Vamos a intentar que este año y, si no está en marcha, que esté muy adelantada", ha señalado Bonig tras hacer hincapié en que tanto si se abre con gestión privada como pública, la línea 2 supondrá un coste para la Generalitat. Tal y como publicó este diario, conservar la Línea 2 del tranvía costará más de un millón de euros.
Actualmente, Infraestructuras continúa "reconsiderando" el pliego de condiciones, que prevé un desembolso de 110 millones de euros durante 20 años, para determinar si algún grupo empresarial puede costear la adjudicación.
La consellera ha relatado que trabajan en "buscar fórmulas" que no supongan mucho desembolso o un compromiso de dinero demasiado elevado para la Generalitat, y ha admitido que este contrato "es difícil de sacarlo en estos momentos" porque, entre otros aspectos, debe ser previamente autorizado por Hacienda.
Ha insistido que el Consell aboga por un operador privado para gestionar la línea al creer que es "mucho más eficaz", aunque también baraja la opción de abrirla provisionalmente mediante FGV.
"Estudiamos todas las posibilidades. Nos gustaría abrirla cuanto antes pero en estos momentos es complicado tanto si se abre de forma privada, porque hay que buscar una fórmula que no suponga mucho compromiso de dinero para la Generalitat, como si es público porque hay que buscar financiación", ha apuntado.
Según Bonig, es incierto "cuando se dice que no cuesta nada" si se pone en marcha por medio de FGV ya que de este modo, ha subrayado, "sí que cuesta".
La línea 2, cuya construcción fue culminada en la primavera de 2011, ha supuesto una inversión pública de unos 100 millones de euros y está previsto que sea la que más viajeros tenga de la red, al unir el centro de Alicante y algunos de sus barrios más poblados con el Hospital General, la Universidad y San Vicente del Raspeig.
