La limpieza en San Vicente del Raspeig es uno de los caballos de batalla del municipio. Supone una de las quejas recurrente de los vecinos, la percepción de que la ciudad está sucia y se ha convertido también en una declaración de intenciones políticas al valorarse si es mejor que sea el Ayuntamiento quien realice este servicio o por contra, debe ser como hasta ahora una empresa la que lo gestione.

Para dilucidarlo la Concejalía de Urbanismo va a constituir una comisión especial con el objetivo de estudiar si es conveniente para San Vicente que se municipalice el servicio de limpieza viaria. Es decir, llevar a cabo una gestión directa. La concejala, Mariló Jordá, considera que es un asunto de alcance en el que deben de pronunciarse todos los grupos políticos y donde también van a participar técnicos del Ayuntamiento cuya opinión considera también muy valiosa, especialmente en materia de personal.

La decisión de la municipalización se tomará teniendo en cuenta el informe encargado por el área de Urbanismo en mayo pasado a la empresa Nuve Consulting que acaba de finalizarse. La edil enviaba el viernes una copia del resultado del informe a todos los grupos, un estudio de 400 páginas con un análisis que contempla aspectos técnicos, económicos, sociales y jurídicos. Ya que la constitución de esta comisión se va a aprobar en el pleno de este mes de octubre. Y a partir del cual se van a desarrollar las reuniones. La concejala reconoce que se desaconseja la municipalización del servicio de recogida de residuos urbanos por lo que se centran en estudiar únicamente la limpieza viaria.

Municipalizar supone asumir también a los 59 trabajadores que actualmente realizan el servicio. Jordá explica que la subrogación del personal que trabaja actualmente para la empresa concesionaria Cespa es una obligación y ese paso está asegurado. Y en el caso de la municipalización del servicio, hay tres opciones para asumir a estos empleados, que no se pueden considerar funcionarios al no haber superado una oposición. Jordá explica que la opción que se contempla es la de crear una empresa municipal.

La concejala advierte de que la intención es que se tome cuanto antes y quiere que no se demore. Sobre todo porque la empresa que realiza actualmente el servicio de recogida de residuos urbanos y limpieza ha sido tajante. El contrato finaliza el 30 de junio, fecha en la que la mercantil Cespa ya anuncia que termina su vinculación y renuncia a las prórrogas.

En una comunicación, la mercantil advierte de que ha asumido «pérdidas recurrentes e importantes en todos estos años de ejecución». La mercantil remitió en julio un escrito al Ayuntamiento advirtiéndole de que avisa con tiempo suficiente para que se ponga manos a la obra y desarrolle el nuevo pliego de condiciones. E insiste en que no va a admitir ningún tipo de prórroga «porque cuentan con tiempo suficiente para tener adjudicada una nueva licitación o en su defecto la municipalización del servicio».