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Un revés para toda la ciudad

El descenso saca a Elche del mapa

Al margen de lo puramente deportivo, el municipio ha obtenido del fútbol en los dos últimos años un motor para generar ingresos directos en hoteles o bares, pero también un trampolín publicitario impagable

Muchos comercios particulares lanzaron promociones. diego fotógrafos

El ascenso del Elche CF a Primera en 2013 trajo consigo no sólo la satisfacción y el orgullo en el plano puramente deportivo para los aficionados, sino también repercusiones económicas y sociales para la ciudad que muchas voces se han encargado de ensalzar. Entre ellas, la Cámara de Comercio de Alicante, que mediante un informe económico cuantificó en 22 millones de euros el impacto económico que tendría la temporada deportiva sobre Elche, incluyendo parámetros directos e indirectos. El descenso ahora, además del enorme disgusto que ha supuesto para la afición, tampoco se limita al plano emocional o deportivo, y las asociaciones de empresas del sector turístico y de servicios se preparan para amortiguar un golpe que resulta más que previsible.

El economista y vicepresidente de la Asociación de Empresas de Servicios de Elche y Comarca, Antonio Andreu, sostiene que además del cálculo de previsión de pérdidas hay que tener en cuenta dos aspectos fundamentales. Por un lado, la pérdida de capacidad económica respecto a visitas por partidos de equipos que arrastran a aficionados de dentro y fuera de la provincia que se alojan, comen y consumen en la ciudad, además del gasto que pueden asumir los equipos y plantillas técnicas visitantes en sí mismos. Ese impacto, por sí solo, ya es importante, sostiene el experto, pero no se puede obviar que, por otro lado, la ciudad se enfrenta a «una pérdida de impactos televisivos o en los medios de comunicación que conseguía el nombre de "Elche" y que suponen un impacto publicitario para quienes ven, leen o escuchan los informativos y que se traduce en que conozcan la ciudad, sepan que tiene dos patrimonios de la humanidad o que se acaben informando sobre ella».

Ese aporte de presencia mediática, que sería desorbitadamente caro si tuviera que pagarse al precio de aparición publicitaria, no se limita a los medios a nivel nacional, ya que «en términos internacionales, la liga BBVA se sigue en todo el mundo, mientras que la liga Adelante no». Los informativos o programas deportivos ya no mencionarán a Elche con la misma frecuencia, por lo que Antonio Andreu reflexiona que «aquellas personas a las que no les gusta el fútbol y dicen que el descenso no les afecta no se han dado cuenta de lo recursos turísticos que genera a nivel nacional e internacional jugar en Primera División, y que va a suponer una gran pérdida en términos cuantitativos económicos pero también cualitativos de imagen».

Esa presencia mediática fue tenida en cuenta en el mencionado informe de la Cámara de Comercio, que en los meses siguientes al ascenso cuantificó en 7,7 millones de euros el valor del impacto publicitario, tal y como informó el delegado en Elche, Carlos Mazón. Indirectamente se esperaban 1,6 millones de beneficios, el propio club obtenía 4,6 millones de euros más (pasando de manejar 6,9 en la temporada anterior a casi 30) y se preveían 9.000 pernoctaciones en los hoteles próximos a la ciudad a lo largo de una sola temporada.

Prestigio

El presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, José Enrique Garrigós, consideró que «no tener un equipo en Primera División en una provincia como la de Alicante es muy negativo por motivos económicos, de imagen, de prestigio... Estamos hablando de la que posiblemente es la mejor liga del mundo, para Elche es terrible pero también para toda la provincia». Garrigós añadió que «ante lo sucedido, la Cámara valora muy positivamente la iniciativa de los empresarios de Elche, que han demostrado ser conscientes de la repercusión económica que tiene para la ciudad y para la provincia; desde la Cámara tenemos que reconocer el ejemplo que ha dado Juan Perán (al ponerse al frente de la campaña para reunir dinero y evitar el descenso a Segunda B), esperamos que cunda el ejemplo en otras facetas de la economía, el deporte o la cultura». Finalmente, el presidente de la Cámara de Comercio también señaló que «ahora lo que el Elche tendría que hacer es rearmarse, aprovechar la circunstancia del concurso de acreedores (aceptada por el Juzgado de lo Mercantil 1 de Elche esta semana) para volver a Primera División, porque es una lástima que después de dos magníficas temporadas hayan primado los motivos extradeportivos».

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Elche, el alcalde, Carlos González, señaló que «es complejo determinar con precisión el impacto económico que para la ciudad tiene el que el Elche CF esté en Primera División». Aún así, dijo, «es indudable que para una ciudad como la nuestra tener al Elche CF en primera implica, por una parte, una importante proyección nacional e internacional de la imagen de la ciudad que es positiva para todos los sectores económicos». Y por otra parte, «la mera dinámica de la Primera División genera un flujo de atracción de aficionados de municipios vecinos durante 19 jornadas que aportan cuantiosos ingresos a la ciudad». De ahí que «recuperar la categoría sea uno de los objetivos que como ciudad tenemos que fijarnos», aseguró.

Euforia

Muchos comercios particulares se sumaron inmediatamente a la euforia con promociones, ornamentando escaparates, adhiriéndose a campañas coordinadas desde el club para promover ventas o regalando consumiciones por cada triunfo del equipo... Con más o menos originalidad, se hicieron desde dónuts a cócteles, menús y ofertas relacionadas con el ascenso o descuentos a los abonados. De aquello queda ya cada vez menos. Y es que las terrazas, bares o cafeterías llenos cuando hay partido fuera de casa, los comercios que han vinculado sus ventas a promociones relacionadas con el Elche CF y con sus resultados, o la ocupación hotelera en los fines de semana de partido pueden ser, según entienden los expertos, la punta del iceberg.

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