En las arcas de Coepa, con el preconcurso de acreedores ya solicitado a raíz del impago al Instituto de Finanzas del crédito para el Centro de Oficios de Babel, no hay ni un sólo euro. Pero, sin embargo, la patronal sí le ha encargado un informe a una consultora -la empresa alicantina Intermundo, que ya trabaja para miembros de la cúpula de la entidad- para tratar de hacer frente a la grave crisis económica, de imagen y credibilidad que atraviesa la organización. Poner «paños calientes» y lavar la cara a una organización que se encuentra en riesgo real de disolución. El documento interno, en poder de este periódico, evidencia que, en estos momentos, la entidad no cuenta con ningún apoyo ni en el mundo empresarial ni tampoco en el político después de años de descontrol económico en la gestión y de luchas intestinas por el poder.
De hecho, la apuesta que pone sobre la mesa Intermundo, entre otras medidas, es la de la apertura de una ronda de contactos con todas las organizaciones empresariales -empezando por la CEOE y Cierval, siguiendo por los «lobbys» Ineca y AVE y acabando por sectores de peso como Hosbec- para recabar el máximo respaldo a favor de su continuidad. «Reunión con Cierval para conseguir el apoyo explícito de esta organización o por lo menos la fotografía que implique el diálogo y la cordialidad entre las dos patronales», apunta Coepa sobre su hermana mayor autonómica. «Es fundamental que desde la patronal nacional -señala sobre CEOE- se diga que es inviable que Coepa desaparezca». Llega a proponer que se busque a una entidad bancaria que emita una nota en la que alerte de la «gravedad» de una eventual desaparición de Coepa. Ninguna de estas dos organizaciones ni otras entidades empresariales ni tampoco ningún banco han salido a la palestra hasta ahora para dar un balón de oxígeno a la entidad que preside Moisés Jiménez, cuya decisión de poner el cargo a disposición de la cúpula también aparece como recomendación de este informe.
La consultora, de hecho, sugiere que el paso atrás del máximo dirigente de Coepa podría ser una baza para negociar a su vez la renuncia de los líderes de entidades críticas como la patronal del metal Fempa, los comerciantes de Facpyme o Cepyme, al mando de Cristóbal Navarro. Del responsable de la patronal de las pequeñas y medianas destaca su capacidad mediática y que «campa a sus anchas» en los medios de comunicación. El documento pone sobre el tapete que la salida de las cabezas visibles de la guerra civil en la que está sumida el empresariado alicantino podría ser la primera piedra para tratar de recomponer una cierta unidad.
Pero a la evidencia de que, por ahora, ninguna organización empresarial ha salido abiertamente a defender la continuidad de Coepa se suma que, en estos momentos, la mayoría de los interlocutores políticos han cambiado. En este sentido, la consultora pone negro sobre blanco lo que es una percepción generalizada: la identificación de la patronal alicantina con el PP. El documento considera que, en estos momentos, ese escenario, trazado durante años de silencio con las políticas de los populares en el Consell que ya discriminaban a la provincia, es un obstáculo para tratar de buscar una salida y el respaldo de una administración que, en estos momentos, está comandada, con la excepción de la Diputación, por los socialistas y Compromís. «Tal vinculación Coepa/PP genera que el discurso de Coepa de "El PP nos engañó" hoy no sea creíble y toda presión hacia el Consell cae en saco roto porque identifican a la organización con los mismos problemas que según ellos han venido a solventar», reza textualmente el documento.
La consultora alicantina elegida por Coepa -junto a la ofensiva empresarial e institucional con la Generalitat, la Diputación y el Ayuntamiento de Alicante- propone además otras acciones para tratar de salvar la crisis de la patronal. Por ejemplo, plantea que la cúpula de la entidad utilice a los trabajadores para lanzar acciones de protesta como cartas en medios, algo que ya están haciendo en los últimos días. También lanzan, con la idea de poner en valor el Centro de Oficios de Babel -uno de los hilos conductores del informe-, una manifestación de los empresarios con camisetas que lleven el lema «Sin Coepa no hay empresa, sin empresas no hay futuro». Intermundo sugiere que sus técnicos realicen una ronda entre los periodistas para «limar asperezas» y que el vicepresidente de Coepa, a su vez, se reúna con el director de INFORMACIÓN, Juan R. Gil, para solicitarle su apoyo. Todo ello, señala la consultora, con la intención de organizar un gran congreso provincial para preparar un gran frente común contra la discriminación de Alicante pero que, en realidad, sirva para «lavar» la cara de Coepa.
