Durante un tiempo fueron las reinas de la televisión y las únicas series que veían los espectadores. Hoy los tiempos han cambiado y las telecomedias están de capa de caída. Cómo conocí a vuestra madre hace ya un par de años que acabó y Friends lo hizo hace más de doce años, pero siempre se pueden revisar los viejos DVDs. No son buenos tiempos para la telecomedia. Cuando llega la hora de las cancelaciones, son las primeras sobre las que cae el hacha de cortar cabezas. Aún así, el género sobrevive con varios títulos de éxito. Entre las mejores propuestas que se emiten actualmente en televisión, el podium lo ocupan The Big Bang Theory, que va camino de sus diez temporadas y posiblemente de su final; Modern Familiy, que acaba de ser renovada para una octava tanda de episodios; y Louie que, aunque tiene aprobada una sexta temporada, se ha tomado un descanso y no tiene fecha oficial de regreso.

El género lleva años tratando de reinventarse a sí mismo para buscar nuevas fórmulas y argumentos más originales. Las risas enlatadas han pasado a la historia (aunque tengo que reconocer que a mí me gustaban), hay un humor más negro y se quiere tender más a lo políticamente incorrecto. Todo ello sin olvidar el tratamiento de los nuevos modelos familiares, las relaciones de pareja y las cuestiones raciales. Siempre hay excepciones a esta revisión. Como muestra está el estreno hace un par de semanas de Madres Forzosas en Netflix (la continuación de la serie de los años 90, Padres Forzosos) que es exactamente lo que siempre fue. Gracias al factor nostálgico, ha tenido una gran acogida de público (que no de crítica, ya que la han vapuleado). Dejando esta excepción de lado, en el post de esta semana repasaremos las diez mejores telecomedias que se han estrenado en la televisión en los dos últimos años.

1) Eres lo peor (FX): Tratan de convencerse a sí mismos de que no son pareja, pero en el fondo lo son. Una comedia antirromántica que nos cuenta la no-relación entre Jimmy y Gretchen. Él es un escritor frustrado cuyos libros no son los más buscados en las estanterías. Ella una publicista de éxito profesional pero cuya vida personal es un auténtico caos. Ambos terminan juntos como puro desahogo sexual para olvidar sus respectivos fracasos amorosos. Por separado son lo peor, pero cuando están juntos nace la magia. Son tal para cual. Ninguno cree ya en el amor y lo suyo es sólo sexo. El problema es que los dos quieren seguir viéndose y no saben cómo compaginarlo con esa actitud de "lo nuestro no es nada" y "yo no creo en el amor". Se trata de una de las comedias revelación del año pasado y de la que en España hemos podido ver de golpe las dos primeras temporadas.

2) Wet Hot American Summer (Netflix): Otra serie ambientada en los 80. Netflix está demostrando que es capaz de lo mejor y de lo peor. Esta serie es una claro ejemplo de lo último. Homenaje a todas aquellas comedias de aquellos años, tipo Los Albóndigas en Remojo, La Revancha de los Novatos, o Porkies y precuela de una película del 2001. Si en aquel filme, que también parodiaba este tipo de cine, se nos contaba el último día de un campamento de verano, en el caso de la serie se trata del primer día del complejo vacacional juvenil. Así que toda la primera temporada, única emitida, transcurre en ese día. Una idea que daría para una peliculilla de 90 minutos, pero que aquí se alarga hasta casi las cuatro horas. Como en muchas de las películas de la época que recrea, actores treinteañeros se hacen pasar por jóvenes adolescentes y se ríe de absolutamente todos los topicos que hemos visto en el cine de la época, hasta de sí misma. Hay algún gag que tiene su gracia, pero si es que en cuatro horas de una parida tras otra, ninguna logra arrancarte una sonrisa, mal vamos. El reparto está plagado de estrellas de la plantalla y hasta tenemos a Jon Hamm y John Slattery compartiendo reparto en una serie desde el final de Mad Men, aunque aquí no llegan a coincidir en un solo plano.

3) Grace y Frankie (Netflix): La vida empieza a los 70. O por lo menos para Grace y Frankie, dos setentonas interpretadas por Jane Fonda y Lily Tomlin, a quienes un día sus respectivos maridos (Martin Sheen y Sam Waterson) les confiesan que tienen una relación entre ellos desde hace más de veinte años y que se van a vivir juntos. Tras la ruptura, las dos mujeres que se habían soportado más bien poco entre ellas tienen que empezar una nueva vida, conviviendo juntas. Mientras ellas aprenden cómo es eso de ligar por Internet, ellos van explorando el salir del armario. Por en medio, los hijos de las dos parejas tratan de adaptarse a la nueva situación y a poner paños calientes entre ellos. Una idea simpática y con un buen reparto. Entre los responsables de la serie está Marta Kauffman, una de las creadoras de la mítica Friends. Dato que no es anecdótico, porque aquella otra serie comenzaba cuando Ross descubría que su mujer era lesbiana y le dejaba para irse con otra.

4) El último hombre en la tierra (FX): En el año 2020, un virus ha acabado con prácticamente toda forma de vida en la Tierra. Phil Miller es el único superviviente y debe hacer frente al apocalipsis. ¿Esto es una comedia? Pues sí, pese al argumento de ciencia ficción pronto comprobamos que una de las historias que está de fondo es la idea de que te toque repoblar la Tierra con la única persona en todo el planeta a la que jamás te llevarías al catre. Naturalmente que Phil va a encontrar a más supervivientes, pero la gracia del asunto está en el orden en el que todos estos personajes irán llegando a su vida. El problema de Phil Miller es que tiene más de Homer Simpson que de Will Smith u otros héroes que han sobrevivido al fin del mundo.

5) Unbreakable Kimmy Schmidt (Netflix): Rosa y amarillo. Estos son los colores con los que viste Kimmy Schmidt, lo que dice mucho de su forma de ser. Pero no es lo que parece. Kimmy ha vivido años desde su adolescencia en un bunker retenida con otras mujeres por el líder de una secta religiosa que les había hecho creer que el mundo había desaparecido por un holocausto nuclear. Tras su liberación, Kimmy trata de empezar su vida desde cero y para ella todo es nuevo y maravilloso, por muy cotidiano que nos resulte a los demás. Eterna sonrisa y mirada ingenua, Kimmy ve todo de color de rosa y se enfrenta a un mundo que no es tan inocente. La serie parte de una muy buena idea, pero hasta donde llevo visto le falta un poquito más de mala baba. Entre los secundarios, un compañero de piso negro, gordo, actor y gay; una anciana casera, medio camello y con antecentes. Kimmy trabaja de niñera para una millonaria con dos hijos, un pequeño malcriado y una adolescente que la detesta.

6) Master of None (Netflix): Si eres hindú, actor y vives en Estados Unidos los únicos papeles a los que podrás aspirar será a dependiente de la tienda de 24 horas, taxista o ese científico de raza exótica que es el primero en morir cuando está experimentando con un nuevo virus. No todos los papeles para ellos puede ser como el de Kalinda Sharma (The Good Wife) o alejados de estereotipos raciales. Esta es la vida del personaje que interpreta Aziz Ansari, que protagoniza, escribe y dirige esta serie de Netflix. Una comedia racial sobre cómo es la vida de un actor de segunda fila que intenta sobrevivir en Nueva York. La serie está en la línea de otras como Loiue o Qué fue de Jorge Sanz, por poner su equivalente hispano y cada capítulo es como una peliculita de media hora de duración. En ellos vemos distintas facetas de la vida del protagonista, como el sexo, la cuestión racial, los problemas con sus padres, etcétera. No conocía a este actor pero es una de las nuevas estrellas de la comedia americana a quien supongo que la cuestión racial habría limitado sus opciones a conseguir papeles. Ansari consigue romper estereotipos. Hay vida para los hindús más allá de Bollywood y este cómico está más cerca del cine de Woody Allen que del otro.

7) Catastrophe (Channel 4): Un norteamericano conoce durante un viaje de negocios a una mujer irlandesa en Londres. Tras un apasionado romance de una semana, ambos vuelven a sus vidas cotidianas. Pasado el tiempo surgen las consecuencias de sus encuentros: ella se queda embarazada. Agradable comedia romántica de la televisión británica que fue una de las series revelación del año pasado. En ella asistimos a los intentos de los protagonistas por intentar que su relación funcione, las dudas sobre si deben o no casarse, mientras los amigos intentan meterse por en medio dando consejos sobre lo que deberían o no deberían hacer. Los protagonistas son Rob y Sharon, curiosamente con los mismos nombres que los actores que los interpretan y que además hacen los guiones. Comedia de autor. Una última curiosidad, entre los secundarios tenemos a Carrie Fisher (la princesa Leia de Star Wars).

8) Black-Ish (ABC): Sería como un cruce entre Modern Family y La hora de Bill Cosby. Los Huxtable ya han quedado desterrados de la televisión por los escándalos sexuales del cabeza de familia. La carrera cinematográfica de Will Smith le tiene alejado de El Príncipe de Bel Air, aunque está trabajando en su resurrección. Y Steve Urkle ya está mayorcito para Cosas de Casa. Así que Black Ish es una telecomedia que habla de cómo es ser negro de clase medio-alta en Estados Unidos hoy en día, que es lo que tenían en común las otras series citadas. La traducción exacta del título es Casi-Negro y la propia serie pone como el prototipo de estos negros que se portan como blancos al propio presidente de Estados Unidos, Barack Obama. En Black-Ish, el padre acaba de ser ascendido en su empresa a un puesto directivo y empieza a preocuparse por que sus hijos conozcan sus raíces y lo que es la raza negra, entendido como una cultura. Comedia familiar que trata de cómo los padres intentan inculcar esos valores a sus hijos en un mundo postObama en el que, afortunadamente, parece que se empieza a dejar de mirar a otros por el color de su piel.

9) Brooklyn Nine-nine (Fox): El día a día en una pequeña comisaría de Nueva York. Recupera el espíritu de esas telecomedias de los años 80 como Juzgado de Guardia y lo pone al día en los tiempos actuales. El protagonista es Jake Peralta, un inmaduro detective de Policía que no se toma nada en serio, desprecia las reglas y para quien todo es un juego, aunque siempre hace lo correcto. Sus gamberradas se topan con la llegada de un nuevo capitán, un veterano policía que ha sufrido discriminación por su condición de negro y homosexual, que pretende brillar con su ascenso logrando una Comisaría impoluta y meterle en cintura. Su compañera es la detective Santiago, quien compite con Peralta por ser la que más casos resuelve y más gente detiene. Otros miembros del reparto es un sargento fortachón con tendencia a sufrir ataques de pánico, una detective dura que trata de esconder sus sentimientos, otro agente patoso y más bien blandito, los veteranos inútiles y la secretaria que hace labores administrativas que esconde un alma de delincuentes.

10) Baskets (FX): En Candilejas, el genial Charles Chaplin interpretaba a un payaso que había perdido la capacidad para hacer reir a su público. El payaso de Baskets jamás ha tenido ese don y es un perdedor en toda regla. Como en una película de Iñárritu, cuando parece que no le puede ir peor, la situación se supera. Pero a diferencia del realizador mexicano esa manera de contar la historia no busca sacar al acomodado espectador burgués de sus lugares de comodidad, sino que se usa con fines cómicos. Cuanto más bajo caiga Baskets, más nos reiremos nosotros. Esto de hacer comedia de existencias patéticas es algo a lo que ya nos tiene acostumbrados el productor de esta serie Louie C. K. en Louie. Como protagonista tenemos a Zack Galifianakis como ese clown que tenía tan poca gracia que ni en la escuela de payasos de París quisieron enseñarle.