El disparatado aumento de reclamaciones falsas por parte de visitantes británicos que vienen sufriendo algunos hoteles de Benidorm desde la pasada temporada turística ha vuelto a sacar a flote un tenso debate que divide a la ciudad de los rascacielos: la modalidad de alojamiento con todo incluido. Se trata de aquellos establecimientos donde el cliente paga por poder consumir bebidas y comidas dentro del hotel con un precio fijado previamente. De esta forma no deben preocuparse del bolsillo durante su estancia. Una oferta que en Benidorm siempre es fruto de polémica y que ayer el presidente de la patronal hotelera Hosbec, Toni Mayor, defendió al apuntar que, al final, «el cliente manda» a la vez que recalcó que 3 de cada 10 turistas extranjeros que llegan a la capital de la Costa Blanca reclaman este tipo de servicios.
Precisamente los hoteles que ofrecen este tipo de alojamiento, conocido como «all inclusive», han sido las principales víctimas de las reclamaciones falsas que los turistas británicos interponen alegando una intoxicación gástrica por algo que se ha consumido en el hotel en cuestión con el fin de recuperar el dinero de sus vacaciones. Una picaresca que ha afectado de golpe a los establecimientos hoteleros que cuentan con todo incluido de Benidorm.
Pese a ello, Mayor afirmó que se trata de una oferta que el turista extranjero demanda y que, por tanto, hay que ofrecer. No obstante, el líder de la patronal sí contempló la posibilidad de que algunos hoteles en concreto, debido a la mejora general que está viviendo el sector turístico, se estén planteando rescindir el todo incluido, aunque ni mucho menos se trataría de una tendencia generalizada.
¿Límites?
Las declaraciones de Mayor llegan después de que el director de la Cátedra de Estudios Turísticos «Pedro Zaragoza», Tomás Mazón, afirmara en una entrevista a este diario que algunos hoteles se plantean limitar el todo incluido para que los estafadores británicos que registran reclamaciones falsas no puedan asegurar al cien por cien que han consumido en el hotel lo que les ha causado la supuesta intoxicación gástrica. Una solución que no ven viable, al menos desde Hosbec.
División de opiniones
Cuando en Benidorm se aborda el conflicto de los hoteles que ofertan el todo incluido la polémica está servida. Mientras que los empresarios del sector hotelero, de entrada, defienden esta modalidad por la demanda que existe desde los bares y restaurantes, como es lógico, cargan contra la misma. De hecho, la división de opiniones llegó a ser objeto de debate municipal hace algo menos de dos años, cuando el grupo socialista presentó una moción para estudiar que desde el gobierno local se llegará a limitar este tipo de oferta en la ciudad. Algo que aunque se aprobó por unanimidad, nunca llegó a materializarse.
