Como un tsunami que invade todo lo que encuentra a su paso. Cerca de tres mil peñistas tomaron anoche las calles de Benidorm para llenar la ciudad del ambiente más desenfadado en la primera noche de las Fiestas Mayores Patronales de la ciudad. La tradicional Entrada de Penyes, que recorrió las calles Ruzafa y Martínez Alejos, fue el preludio de lo que después sería la noche. Y el punto desde el cual esta oda a la juerga que representan las peñas cuando cae el sol se dispersó hacia otros puntos del centro de la ciudad, donde los peñistas tienen montados sus cuarteles festeros.

Pasadas las 22.30 horas, el desfile que marca el inicio oficioso de los festejos comenzó a rodar en el año en el que la Associació de Penyes celebra el 30 aniversario de su fundación. Por ello, los componentes de la junta gestora que preside Jaime González repartieron a todos los festeros bolsos conmemorativos de esta efeméride para que les sirvan de complemento durante estos días grandes.

Las reinas de las Fiestas, María Pérez y Megan Butterton, abrieron la Entrada de Penyes junto a las 20 niñas y doce jóvenes que forman parte de sus cortes de honor y los 62 mayorales de la Comisión de Fiestas. Tras ellos, la Penya La Soca, la más veterana del censo de la Associació y con más de 35 años de historia a sus espaldas, fue la primera peña en salir el desfile. A ella se unió a la altura de la tribuna el alcalde de Benidorm, el socialista Agustín Navarro, componentes de esta histórica formación desde sus inicios y en la que comparte las fiestas junto al concejal de Presidencia, Conrado Hernández (PSOE) y el exedil del PP Francisco Saval, quien fue el primer presidente de la Associació de Penyes. Tras ellos, una a una fueron desfilando las otras 175 peñas que conforman este año el censo de asociadas, y que recorrieron las calles más céntricas de la ciudad durante cerca de tres horas.

Gorros, pelucas, tocados, gafas multicolor y otros complementos, además de unas enormes manos con el programa de Fiestas, sirvieron a los peñistas para completar su habitual uniforme, compuesto principalmente por blusones, camisetas o polares con los logotipos de las peñas de las que forman parte. A su paso por tribuna, plagada de autoridades locales, el presidente de la Associació y otros cargos festeros colocaron a los participantes los estandartes acreditativos de su participación en los festejos de este año, así como pins y otros obsequios.

Entre los participantes ayer en la entrada, además de festeros, estuvieron numerosos cargos políticos de todo signo, destacó la presencia de la exministra socialista Leire Pajín, que se ha desplazado estos días a la ciudad para vivir los festejos junto a familiares y amigos en su peña, Paparinell.