El Ayuntamiento exigirá a todos los racós de hogueras y a las barracas que tengan dos salidas, la principal y otra de emergencia, para darles el certificado final de plantà. También son obligatorios los extintores, hasta ahora de libre instalación, para todos los recintos, sean de las dimensiones que sean, en los puntos susceptibles de producirse un foco de incendio, es decir, en la barra, los que la tengan, y en la zona de los equipos de música. Otro requisito que se controlará es que el cableado de la instalación eléctrica sea aéreo y esté protegido por un conducto aislante para evitar contactos con el entorno.
Todos estos requisitos deberán figurar en el certificado de seguridad que las comisiones de hogueras y barracas tienen que presentar este año en la Concejalía de Fiestas de forma obligatoria para poder plantar por la entrada en vigor de un decreto que desarrolla la ley autonómica de Espectáculos, Actividades Recreativas y Establecimientos Públicos, que, pese a ser de 2010, aún no se había aplicado en Alicante. Las comisiones tenían de plazo hasta mitad de mayo para presentar estos proyectos elaborados por un arquitecto técnico o un ingeniero industrial con todos los elementos que instalarán estas fiestas en la vía pública, y aunque el 90% los han remitido en plazo, aún hay comisiones pendientes de hacerlo, a las que el Ayuntamiento les da cinco días para presentarlos en el registro general. Después tendrán que revisarlos todos para comprobar que incluyen los requisitos obligatorios, aunque después el técnico que ha elaborado el proyecto tendrá que verificar que cumple lo que recoge durante el mismo montaje de los recintos, en la tarde del 19 de junio, lo que podría colapsar el arranque de la Fiesta. Si se cumple la memoria, emitirán el certificado final confirmando que todo está en regla. De lo contrario, el presidente de la hoguera o barraca será responsable y se arriesgan a que la Policía Local precinte la instalación.
Uno de los técnicos que más informes está haciendo es el arquitecto técnico y foguerer Juan Francisco Galvañ, quien ha redactado 27 proyectos «de apertura, seguridad, electricidad y medidas de protección contra incendios y evacuación, así como de equipamiento según el aforo y servicios en función de las dimensiones». En el caso de los recorridos de evacuación, indicó que se están buscando soluciones técnicas sencillas para abrir fácilmente las vallas, y añadió que también habrá que dejar pasillos despejados, más amplios conforme más grande sea el recinto. También se revisarán los elementos metálicos, además de los eléctricos, «lo que antes hacían los organismos de control técnico del Ayuntamiento».
Sobre los aforos, Fiestas aún no tiene constancia de que vaya a haber recintos que rebasen las mil personas, lo que obligaría a trasladar la documentación a la Generalitat para obtener el permiso, y que obligaría a estos racós a tener ambulancias. Sí hay varios que declaran una capacidad de mil personas, justo el máximo que es competencia del Ayuntamiento para dar la autorización, que deberán tener vigilante de seguridad y sistema de control de acceso, como pulseras que deberán llevar las personas que alquilaron las mesas. Son sobre todo comisiones de Especial pero también hay alguna de Sexta. Aunque el Ayuntamiento da una ayuda económica para las memorias, las de los recintos grandes se encarecen más allá de los 400 euros.
