El Servicio Valenciano de Empleo y Formación (Servef) se saltó la «normativa aplicable» e incurrió en «incumplimientos significativos» de la ley en la gestión de al menos 1,4 millones en subvenciones en 2014, el último año completo del Consell del popular Alberto Fabra. De la revisión de expedientes realizada por el Síndic de Comptes se desprenden un cúmulo de infracciones, especialmente en los «planes de formación para el empleo, dirigidos preferentemente a ocupados». En dos de los expedientes de subvención, en un caso por 280.029 euros y en otro de 218.343 euros, el órgano auditor halló la falta de una memoria de actuación «justificativa del cumplimiento de las condiciones impuestas en la concesión» de las ayudas.

En una de esas dos subvenciones, la de mayor cuantía, el beneficiario recurrió a una subcontrata para ejecutar la actividad de formación que le fue subvencionada. En el expediente se halla una segunda violación de la normativa aplicable. Concretamente, «se han realizado pagos al subcontratista antes de haberse autorizado la subvención». En una tercera línea de ayudas, por 121.052 euros, se apunta que no consta «el contrato suscrito ni la autorización previa de la subcontratación por parte de la entidad concedente de la subvención». Además, en dos de los expedientes revisados se lamenta que no se acredite que la contratación se haya realizado «de acuerdo con las condiciones normales de mercado», ni tampoco que se hayan solicitado «como mínimo tres ofertas de diferentes proveedores».

El Síndic de Comptes detectó una ayuda de 850.000 euros a una asociación, «dentro de las actuaciones de fomento de empleo e itinerarios formativos en el sector materiales de construcción, concedida mediante resolución del director general en vez de por convenio». «No quedan justificadas en el expediente las razones excepcionales para la concesión de subvenciones nominativas mediante resolución», lamenta el Síndic. La misma ayuda nominativa aparece en los presupuestos de 2013 y 2015 por importes diferentes.