La salida desde el Puerto de Alicante de la oficiosa vuelta al mundo de veleros -Volvo Ocean Race- el próximo 11 de octubre ha provocado ya el primer impacto positivo en el sector turístico local y, en concreto, el hotelero, al que le llueven las reservas de habitaciones desde el pasado agosto, con precios que superan, en algunos casos, en un 100%, a los que se piden en agosto. Varios hoteles, sobre todo los más próximos al puerto, tienen ya completas sus plazas a partir del día 2 de octubre con precios que alcanzan puntas de hasta los 270 euros la habitación. Incluso hay establecimientos que se han convertido en sede de tripulaciones, lo que ha obligado, incluso, a adaptar las instalaciones a sus necesidades.
La Asociación Provincial de Hoteles prevé que la ocupación media sea del 80% durante los doce días de impacto directo de la Volvo, doce puntos más que en durante octubre normal, aunque su presidenta, Cristina Rodes, matiza que «aunque contar con la Volvo es algo extraordinario para Alicante hay que tener en cuenta también que este año la salida se ha adelantado casi tres semanas respecto a la edición de 2011 y los turistas de la Volvo se juntan con los habituales de estas fechas, por lo que un vez termine la regata podremos ajustar más su repercusión directa y real en el sector».
La Volvo no sólo permite la mejor ocupación del año durante 12 días a los hoteles de Alicante, sino que se reparte por toda la Costa Blanca. Ayer, el emblemático Montíboli de La Vila y el complejo Villaitana de Benidorm tenían varios grupos confirmados para los fines de semana que coinciden con la salida de la Volvo, lo que supone alojamiento y varias cenas.
La repercusión económica para la ciudad en todos los conceptos alcanzará los 100 millones de euros, según el Ayuntamiento de Alicante, repartidos entre la hostelería, turistas que vengan a ver la regata y todo lo que mueve la propia logística de los equipos, que se abastecen de proveedores locales.
Ayer mismo, en la zona Volvo varios pintores se afanaban en el repaso de las quillas de los barcos. Fuentes del Consistorio alicantino apuntaron que durante las tres semanas de impacto directo de la regata se crearán alrededor de mil empleos.
Este año se ha recortado todo e, incluso, el recinto de la Village del Puerto -unos 40.000 metros cuadrados- estará abierto menos días al público, lo que impedirá posiblemente que se alcance el millón de visitantes aunque, por otro lado, este año la salida coincide en pleno puente festivo en la Comunidad Valenciana por lo que no se descarta que los días previos a la salida Alicante reciba visitantes de Valencia y Castellón.
Cristina Rodes, presidenta de la Asociación Provincial de Hoteles, admitió que «no cabe duda de que la Volvo anima la ocupación hotelera, tanto por la regata en sí como por todo lo que se mueve a su alrededor. El objetivo tiene que se mantenerla. Está firmada la salida de 2017 pero nos consta que ya hay muchas ciudades aspirantes a la edición de 2020. Nuestro reto y el de toda la ciudad debe ser que Alicante sea sede permanente de la salida de la regata», aseveró Rodes.
Alrededor de 350 periodistas procedentes de quince países cubrirán la salida Volvo Ocean Race. La organización de la VOR ha acreditado ya a 350 periodistas que informarán de todo lo que suceda en el puerto alicantino desde el momento en el que se abra el Race Village, el jueves 2 de octubre, hasta que el día 11 los barcos inicien la primera etapa, que les llevará a Ciudad del Cabo (Sudáfrica).
Profesionales que contribuirán a animar la ocupación de los hoteles de Alicante donde también quedan todavía plazas hoteleras.
