Algunas imágenes que se pueden disfrutar en la cantera del cabezo del Oriolet en las últimas semanas parecen más propias de una cordillera alpina que del paisaje semiárido de maquia mediterránea de la Sierra de Orihuela. Un lago azul, con reflejos verdes de piedra de metabasita, llena el hueco que dejaron décadas de explotación de una cantera al aire libre.
La DANA de septiembre comenzó el proceso de creación de esta insólita laguna encaramada sobre el oriolano barrio de San Antón y su palmeral. Y la borrasca Gloria y las constantes lluvias de primavera terminaron el trabajo. Ahora se vislumbra una lámina de agua de casi cinco mil metros cuadrados y entre medio metro y dos metros de profundidad. Un efímero humedal, ubicado junto al túnel de la N-340 y el mirador del oasis urbano de palmeras, que podría albergar más de cinco metros cúbicos de agua, probablemente con una elevada conductividad al atravesar zonas de elevada salinidad antes de llegar a la cantera.
No es la primera vez que este espacio retiene una cantidad importante de agua, pero sí que presenta ese aspecto, espléndido y colorista. Aunque la Sierra de Orihuela no se destaca por albergar fuentes o ser origen de caudales permanentes. Al contrario. Es una zona extremadamente árida que a duras penas supera los 280 litros por metro cuadrado en su base y algo más en las zonas más altas -hasta seiscientos metros-. Solo cuenta con un par de fuentes documentadas: San Cristóbal, con apenas caudal en Raiguero de Bonanza, y las de San Antón, en la zona de descarga natural del acuífero de la sierra y que surgen junto al Colegio Santo Domingo -termales y de agua salada-. En su día dieron para explotar un afamado balneario ya desaparecido.
El término municipal de Orihuela terminará el año hidrológico con unos registros de precipitaciones que ya son históricos tres meses antes de que termine en septiembre. En algunos puntos supera los mil litros por metro cuadrado. Increíble en unas tierras donde ni siquiera las repoblaciones de pinar, resistentes a la sequía, han podido sobrevivir en los últimos años al estrés hídrico, circunstancia aprovechada por la oportunista plaga del tomicus que infesta y mata a una especie ya por sí acostumbrada a las dificultades. Sin embargo ahora las manchas de pino que sobrevivieron se han recuperado. También las que rodean el lago del Oriolet.
Patriminonio industrial
El concejal de Patrimonio del Ayuntamiento de Orihuela, Rafael Almagro explica que la cantera de áridos dejó de explotarse hace más de treinta años. La zona está restringida al paso de personas desde su cierre y la Policía Local ya se ha apresurado a advertir que está prohibido el baño.
El edil señala que es una zona muy interesante desde el punto de vista geológico y la incipiente industria minera que se desarrolló durante la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX en Orihuela. De la cantera que funcionó buena parte del siglo pasado, sobre unos 15.000 metros cuadrados llegaron a extraerse hasta 45.000 metros cúbicos de metabasita y otros materiales a través de galerías y con ayuda de explosivos al aire libre. Esta roca, de tonos verdes y grises, es un tipo de mineral muy duro empleado para producir adoquines, balasto para las vías de tren o áridos para asfalto de carreteras.
Ya antes, en la segunda mitad del XIX acogió una de las pocas explotaciones mineras de mercurio de España. Los restos de las galerías y túneles, del horno de alaudeles Santa Matilde para procesar cinabrio y obtener mercurio, y la Casa de los Mineros de la mina "Virgen del Carmen" todavía se encuentran en pie, aunque en mal estado de conservación, junto a la cantera.
El Ayuntamiento tiene previsto comenzar en breve la recuperación patrimonial de la Casa de los Mineros, muy deteriorada, que ya sufrió derrumbamientos en 2014 y 2018 y situada a escasos metros de la "nueva" laguna. El edil explicó que la gota fría de septiembre destruyó el camino de acceso a la zona que se ha recuperado ahora para comenzar las actuaciones de puesta en valor patrimonial en su primera fase, justo en el momento en el que iban a comenzar las obras de consolidación de la Casa de los Mineros, adjudicadas en junta de gobierno en junio de 2019 por 68.900 euros. También del proyecto del interesante horno, ejemplo de arqueología industrial único en España, aunque este proyecto todavía no tiene fecha.
