El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Urrea, se ha reunido esta mañana el alcalde de Dolores, José Joaquín Hernández, y con los regantes del Sindicato General de Aguas de Dolores, para tratar el problema de contaminación en el río Segura provocado por los residuos sólidos flotantes que llegan al cauce a través de los canales de riego.

Ante la situación constatada de aportes en continuo, que finalmente quedan recogidos en la barrera situada en Guardamar, el presidente les ha informado de la ejecución de las obras de colocación de rejillas en el punto de entronque de los azarbes con los cauces para realizar una retención sectorizada.

Corresponderá a las CC.RR la limpieza del sistema y la colocación de dichos residuos en los contenedores que deberán suministrar los distintos servicios municipales implicados. Finalmente deberán retirase los mismos para su valorización.

Ambas administraciones, así como los regantes, se han comprometido a trabajar de manera coordinada para que la citada actuación posibilite paliar la situación que afecta recurrentemente a la Vega Baja.