El Ayuntamiento de Torrevieja ha comenzado las obras para suprimir resaltos de avenidas y calles de la ciudad, que incumplen la normativa y que además han generado en los últimos años reclamaciones y quejas por parte de conductores privados y servicios públicos sanitarios, policía local y bomberos. El municipio va a invertir 48.299 euros.

El concejal de Obras y Servicios, Domingo Soler, dio a conocer ayer estos trabajos que se han realizado en diferentes avenidas y calles de la ciudad para la eliminación de los resaltos reductores de tráfico considerados «peligrosos». En concreto se está actuando en nueve puntos: avenida del Agua, calle Sauce, y sobre todo a la largo de la recta de la avenida Desiderio Rodríguez: frente al número 42, a la altura de la concesionaria del Taller Rubio, Magani y junto a la rampa Playa de los Naúfragos -puntos especialmente demandados por ser itinerario habitual de servicios sanitarios y bomberos de entrada y salida del casco urbano-. También se ha intervenido en la avenida de Villa Madrid y la Ronda César Cánovas. Soler explicó que «los resaltos no presentan ni reúnen las condiciones de seguridad y uso necesarias para su función normal». En este sentido, se ha valorado el perjuicio en la seguridad que generan en el paso de camiones de gran tonelaje, en los camiones de gran longitud así como en los vehículos de dos ruedas. Con esta iniciativa se trata de mejorar la seguridad y de dar respuesta a una demanda que por otra parte ha supuesto reclamaciones al Ayuntamiento en materia de daños en los amortiguadores de vehículos de gran pesaje así como por la rotura de elementos hidráulicos.

Eficacia

«Especial importancia tienen los vehículos de emergencias sanitarias, así como los de extinción de incendios y policía, ya que cada vez que afrontaban un resalto peligroso de este tipo ponían en riesgo la eficacia y corrección de su labor», especificó Soler. La misión de estos conocidos como «badenes» o «guardias tumbados» era actuar como reductores de velocidad en tramos y puntos especiales donde hay mayor riesgo de atropello o de accidente -rectas o zonas de playa en el caso de la La Mata y Los Náufragos, donde se habían producido accidentes con peatones. Los reductores sobrepasaban los diez centímetros de sobreelevación que permite la ley y no respetaban la regulación sobre su señalización: únicamente con franjas blancas y no con otros colores. La supresión solo viene acompañada con el repintado de los pasos de peatones previos. La información sobre a qué empresa se ha adjudicado el contrato menor no está en el perfil del contratante local, ni en la plataforma estatal.