El Ayuntamiento de Orihuela advirtió ayer del riesgo que supone la falta de mantenimiento del río Segura, así de los cauces, ramblas y barrancos. En la mente de los oriolanos está una fecha reciente, la del 18 de diciembre de 2016 cuando el río Segura se desbordó 29 años después de que sucediera un episodio similar. El Consistorio quiere evitar que vuelva a suceder ya que muchos pronósticos avisan de que este otoño se puede volver a repetir la gota fría.

El principal riesgo se encuentra en la acumulación de cañas en algunos tramos del río. Es especialmente reseñable las cañas que apenas dejan ver el agua antes de la entrada del cauce al casco urbano y, fuera del municipio, en Benejúzar, donde ya se ha alertado del peligro que supone el no retirarlas.

El concejal de Medio Ambiente de Orihuela, Miguel Ángel Fernández, y el de Emergencias, Víctor Valverde, anunciaron ayer que han remitido una serie de peticiones y exigencias a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), como máxima responsable de la limpieza del río, pero también a la Subdelegación del Gobierno y al Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela para que, en lo que les competa, lleven a cabo los mantenimientos necesarios para evitar inundaciones en el caso de que se produzcan fuertes precipitaciones. El río creció en caudal el pasado fin de semana debido a las lluvias, por lo que saltaron algunas alarmas.

En concreto, el Ayuntamiento pide a estos organismos que actúen en el Reguerón y en el tramo del río Segura a su paso por Orihuela, debido a las posibles fuertes lluvias de esta época y sus consecuencias. «Se trata de medidas muy necesarias, que se deben acometer lo antes posible, para evitar inundaciones y episodios como los que provocaron en su momento las lluvias torrenciales de 2016», explicó Valverde.

Conversaciones

Por su parte, el edil de Medio Ambiente señaló que mantiene conversaciones desde enero de 2017 con la Confederación Hidrográfica del Segura, el Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela y la Subdelegación del Gobierno de Alicante, para llevar a cabo medidas de este tipo. «Se precisa de una inminente atención de limpieza y mantenimiento para evitar daños por los efectos de ese potencial fenómeno atmosférico si llegado el caso tuviera lugar», destacó Fernández. «Llevamos un año y medio exigiéndoles que tomen medidas y solo han hecho un par de cosas, limpiar los lodos del río y poco más, y puede venir la gota fría y después todos a rasgarse las vestiduras», se quejó.

El edil explicó que el Ayuntamiento está asumiendo tareas que no le competen como limpieza de ramblas ante la falta de actuación de la CHS. «No puedo dejar que se dejen de realizar actuaciones que luego perjudican a los ciudadanos», indicó Miguel Ángel Fernández quien recordó que el tramo urbano del río lo mantiene sin residuos el Ayuntamiento porque sí le compete. «Se escudan en la falta de presupuesto pero las personas están por encima de eso, saque usted el dinero de donde sea», exigió el concejal a la Confederación del Segura.

Actuaciones

En concreto las actuaciones primordiales que pide el Ayuntamiento de Orihuela son la necesidad de actuar cerca de la unión del Reguerón con el río Segura, así como reponer o mejorar las compuertas de los avenamientos de aguas que llegan al Reguerón a lo largo del municipio, por parte del Juzgado de Aguas, la limpieza en el soto del río del Rincón (ubicado en la pedanía de Molins), dónde sería necesario reponer y acondicionar un muro de protección de la mota que está incompleto, así como también en diferentes puntos sería necesario adecuar y reforzar la mota de ese tramo, lo que debería hacer la CHS. El Consistorio también ha remitido a la Subdelegación las peticiones que pide a la Confederación como la retirada de cañas en el cauce del río, limpieza de barrancos y ramblas. «Esperamos que lo hagan lo antes posible para que los vecinos de la Vega Baja puedan estar tranquilos», señaló Fernández.

El gobierno local aún no se ha reunido con la nueva directiva de la CHS, encabezada por Mario Urrea, aunque lo tiene pendiente. En ese encuentro se tratará la reutilización de agua en el Rincón de Bonanza, vital para el Palmetum, así como en el casco urbano. Algo que el Ayuntamiento solicitó hace 2 años. También pretende el Consistorio poner una pantalla de recogida de residuos flotantes en el río para evitar que lleguen al tramo urbano.