Mas de doscientos residentes en La Mata en Torrevieja, la mayor parte veraneantes, han cortado hoy sobre la ocho de la tarde, y por segundo día consecutivo, la N-332 a su paso por la pedanía. En las dos ocasiones, ayer y hoy, el paso de vehículos por la carretera, utilizada en ese tramo de cuatro carriles por miles de conductores a esas horas, ha estado cortado durante unos quince minutos.

El motivo de estas protetas es reivindicar a la administración la reparación de la senda peatonal de madera junto a la playa, que presenta desde hace más de cinco años un deplorable estado de conservación y que, según los vecinos, genera caídas de peatones a diario. "Fuera tablones, paseo en condiciones", era uno de los lemas más repetidos por los concentrados. Otros bromeaban con la numerosa presencia de efectivos policiales -la presencia policial es otra de las reclamaciones vecinales- : "Hemos visto más coches patrulla de la Guardia Civil en dos días que todo el año"

En las dos cortes estuvo presente un amplio dispositivo de seguridad de la Guardia Civil, con apoyo de la Policía Local para instar a los concentrados a despejar el vial, dado que la manifestación no estaba autorizada por la Subdelegación del Gobierno. Autorización que no solo sirve para que las fuerzas de seguridad tengan constancia del acto, también para garantizar tanto la seguridad de quienes se concentren y como la de quienes se vean afectados por la protesta.

El germen de esta nueva protesta veraniega es la campaña llevada cabo por vecinos de La Mata con una recogida de firmas con el objetivo de presentarlas ante el Ministerio de Medio Ambiente -que es la administración competente para invertir en la senda, construida en su día sobre dominio público de la arena de la playa-.

La Plataforma Independiente Matera (PIM) solicitó ayer permiso para realizar la concentración en la plaza de Encarnación Puchol. Recogió casi mil firmas en una hora, intentó concentrarse en la calle Mayor y la Guardia Civil lo impidió. Criterio que los convocantes respetaron.

Sin embargo, un sector de los concentrados, según fuentes consultadas por este diario residentes temporales en La Mata estos meses de verano, reprochó al PIM su supuesta falta de contundencia y decidieron por su cuenta y en contra del criterio del PIM encabezar una protesta instantánea. Primero ocuparon la senda lanzando a la arena todos los tablones sueltos del camino -que son muy numerosos-. Después se dirigieron a la carretera y la cortaron sin previo aviso y de forma espontánea. Hoy han hecho lo mismo pese a las advertencias de que sin la autorización previa de subdelegación la Guardia Civil pueda haber identificado a varios vecinos, que ahora se exponen a multas elevadas.

"La gente tiene razón en su enfado. Pero nosotros estamos con la legalidad. No secundamos el corte de la carretera sin autorización", ha explicado la portavoz del PIM, Inma Azpiazu, quien explicó que fue increpada en el acto de ayer por quienes pedían una acción más contundente y a continuación idenficada por la Guardia Civil.

El Ayuntamiento siempre ha asumido el mantenimiento de la senda, pero en sus últimas declaraciones sobre este asunto, el alcalde, José Manuel Dolón (Los Verdes) José Manuel Dolón (Los Verdes)dijo que esas tareas ya servían para poco ante el deterioro global del recorrido y reclamó a Costas una inversión importante para renovar todo el paseo. El concejal de Playas, Javier Manzanares, se comprometió a renovar tablones muy deteriorados pero su iniciativa se limitó a una parte muy pequeña la senda.