Es, un año más, otra de las imágenes del verano en Torrevieja. La CV-95, el principal acceso a la ciudad desde Orihuela y el interior de la comarca, colapsado por el tráfico, sobre todo de en sentido de entrada. Este verano con una retención que alcanza casi los dos kilómetros: se prolonga en algunos momentos del día desde la rotonda de La Veleta hasta el Hotel Doña Monse. El tráfico se ha ido incrementando en los últimos años, del orden de un 2% anual en la última década, conforme esta carretera se ha convertido en la principal vía de acceso desde el interior de la comarca al litoral oriolano y su centro comercial, y evitar el peaje de la autopista a Cartagena. Esta retención afecta al paso de ambulancias que se dirigen al Hospital Universitario de Torrevieja.

El desdoblamiento de la carretera está previsto, al menos en el tramo comprendido entre La Veleta y la rotonda de Los Altos, a lo largo de más de 700 metros, desde hace casi quince años. En un principio, debía ser asumido o por el futuro urbanizador de ese sector, ya descartado, o por la concesionaria privada de la gestión del departamento de salud. Luego, la Generalitat incluyó el tramo en el ámbito de la construcción de la autovía de Torrevieja a Orihuela, adjudicada en 2007 y que un tribunal tumbó por carecer de estudio de impacto ambiental.

El «tapón» se produce en la rotonda que da acceso a la N-332, tanto para realizar el peligroso cruce a la izquierda a la variante dirección Alicante, como para incorporarse la misma carretera desde la desalinizadora para la costa oriolana y la gran superficie de La Zenia. Por otra parte, no está señalizada la alternativa de llegar a la N-332 y a La Zenia en la rotonda de acceso al Hospital, a través de Los Altos y la avenida Escorpiones.

El alcalde de Torrevieja, José Manuel Dolón (Los Verdes), indicó que el Ayuntamiento va a reclamar a la Generalitat, como titular del vial, que contemple la duplicación de la carretera en los presupuestos de la Comunidad para 2019.

Una ejecución que en estos momentos podría realizarse con un abono a los propietarios del suelo con expropiaciones más reducidas de las previstas en el proyecto porque los terrenos situados a ambos márgenes del actual vial son rústicos y han perdido, con su protección en el Pativel, toda opción de urbanización, mientras ese plan supramunicipal para la protección de espacios litorales y de segunda línea esté vigente.

El alcalde explicó que el equipo de gobierno mantiene públicamente «la necesidad de que se ejecute esa infraestructura porque es necesario para vertebrar la comarca y fundamentalmente para dar seguridad a todos los usuarios que día a día usan los servicios del Hospital Universitario o se desplazan a Torrevieja y a las playas de Orihuela». Y agregó: «Nosotros lo que pedimos es el desdoblamiento de un tramo de la carretera de 722 metros desde la rotonda de Los altos hasta la N-332». Para el primer edil es «una indecencia que estas obras que estaban previstas junto con la construcción del Hospital y así se llamaba el Plan Especial y no fueron ejecutadas por las adjudicatarias de dicho proyecto en su día para que entrara en funcionamiento el mismo día que el Hospital 2006». El primer edil asegura que el Ayuntamiento, bajo el mandato del PP «regaló a las empresas cuya UTE ejecutó las obras 1.527.426 euros, que era el coste en el que había valorado el Ayuntamiento, en aquella fecha, la obra».

Peatones

La carretera autonómica cuenta con una media de paso diarios de vehículos de más de 20.400 diarios, según el último aforo (2017) de la Generalitat para el tramo comprendido entre la salida de la autopista lindando con San Miguel de Salinas y La Veleta, y con un incremento total del volumen de tráfico en los últimos cinco años, desde 2013, del 10%.

A las retenciones y los problemas de los vehículos de ambulancias que deben abrirse paso entre ellas, se suma el uso creciente y my peligroso de los márgenes del vial, sin aceras, por parte de peatones para llegar al hospital comarcal. Un auténtico «polvorín» para la seguridad del tráfico.