Orihuela ha celebrado hoy un pleno con muchas preguntas y pocas respuestas que ha tenido como protagonista al alcalde, Emilio Bascuñana, del Partido Popular (PP). La sesión tenía por objeto debatir sobre las informaciones publicadas que apuntan a que el regidor, entre 2007 y 2014, cobró más de 330.000 euros sin acudir a su puesto de trabajo en la Dirección Territorial de Sanidad en Alicante. PSOE y Cambiemos, en la oposición, han intentado someter a un tercer grado a Bascuñana para exigirle que despeje numerosos interrogantes y aclare en qué consistió su trabajo exactamente. Pero se han ido igual que han llegado porque el regidor se ha negado a contestarles. Les ha dicho, eso sí, que los interrogatorios se hacen en los tribunales y les ha retado a denunciarlo si creen que se han cometido irregularidades. "Este pleno pretende ser un linchamiento mediático por acusaciones que no se pueden demostrar porque no son ciertas. Mi trabajo ha sido legal. Quien tenga la sospecha de algún delito que vaya al juzgado en vez de hacer un circo", ha dicho el regidor.
Los 55 minutos que ha durado la sesión extraordinaria forzada por la oposición cambiarán bien poco el rumbo del Ayuntamiento. Bascuñana sigue teniendo la confianza de Ciudadanos (Cs), su socio de gobierno. El portavoz, Juan Ignacio López-Bas, ha considerado hoy, al igual que hizo hace un mes, que el alcalde no ha dado suficientes explicaciones sobre todo este asunto, si bien cree que no hay motivos para exigirle que deje el cargo, al menos por el momento. La corporación sigue a la espera de que la Conselleria de Sanidad emita un informe sobre la gestión del ahora alcalde durante su etapa como asesor de Sanidad y solo entonces, y en función de las conclusiones, podría desencadenarse algún tipo de consecuencia. En el pleno, López-Bas se ha referido a una hipotética moción de censura sin citarlo de forma expresa. Al PSOE y Cambiemos les ha dicho que las puertas de su despacho "están abiertas para hablar", pero les ha dejado claro que hoy por hoy "no hay ningún dato objetivo" que apunte a esas posibles irregularidades, por lo que ha considerado que el debate celebrado hoy ha sido del todo estéril porque discurría sólo basado "en hipótesis".
¿Es cierto que cobró sin acudir a su puesto de trabajo? ¿Por qué omitió en su currículum el puesto que ocupó en Sanidad durante esos años? ¿Quién lo reclutó para el puesto y con qué objetivos? ¿Cobró algún complemento salarial que no le correspondía? ¿Asumirá alguna responsabilidad política si el informe de Sanidad le culpa? Esas son algunas de las preguntas que han lanzado a Bascuñana los portavoces del PSOE, Carolina Gracia, y el de Cambiemos Orihuela, Karlos Bernabé. Durante la sesión, por más que ambos han insistido en que se despejaran esos interrogantes, no lo han conseguido. A juicio de Bernabé, el regidor tiene un "déficit de cultura democrática" por negarse a dar explicaciones en el pleno, "no como sujeto, sino como alcalde de Orihuela". "El alcalde lo presenta como una cacería para acabar con su carrera política y afectar al nombre de la ciudad" pero "solo ha reaccionado con soberbia y amenazas de querellas", al igual que, a su juicio, hacía la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. El concejal ha insistido en que "la misión del pleno es la dación de cuentas" y por eso le ha lanzado una batería de preguntas que no han sido contestadas.
Por su parte, la portavoz socialista ha aseverado que lo que está en duda es si Bascuñana "se ha beneficiado para su promoción personal y política a cuenta de la Sanidad" y ha valorado que Orihuela se merece "gobernantes que no estén bajo sospechas". "Ahórrenos la vergüenza y asuma su responsabilidad por una vez", le ha dicho a Bascuñañana. La socialista ha proseguido diciendo que desde que esta polémica saltó a los medios de comunicación, el regidor "nunca ha tenido la voluntad de sacar un papel y demostrar que las acusaciones son falsas". "Aquí, en el pleno, es donde tiene que dar explicaciones políticas", le ha requerido.
Bascuñana les ha contestado que la mayor prueba de que trabajó durante esa etapa es "que a final de mes le pagaban la nómina" y ha dicho que la adscripción a ese puesto la rubricó el director general de Recursos Humanos de la Conselleria. "No fue un puesto para acomodarme y que viviera bien, era porque necesitaban ese servicio y yo podía hacerlo satisfactoriamnente". El regidor ha asegurado que durante esos años mantuvo numerosas reuniones con responsables de la Conselleria, de la Subdelgación de Gobierno y con alcaldes y concejales de Alicante y la Comunidad Valenciana. También que pasó consulta como médico durante esa etapa y eso es algo que podrían acreditar numerosos ciudadanos. La oposición "intenta tomarse la Justicia por su mano y lo que hacen es bochornoso. Tengo una carrera y un prestigio que me he ganado con mi trabajo y nadie me ha pedido explicaciones más que ustedes", ha zanjado. Del resto, de las preguntas que la oposición quería que contestara, no ha dicho ni una palabra.
Una imagen de la sesión plenaria celebrada esta mañana en Orihuela. Tony Sevilla
