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La «fiebre» del pescado azul atrae a los barcos hasta Torrevieja

El boquerón y la sardina retienen a decenas de pesqueros en la bahía desde hace año y medio

Arriba, subasta en la lonja. Abajo, llegada de la flota. D. Pamies

A la sardina y el boquerón, le han seguido ahora sus depredadores, la melva y la bacoreta. La «fiebre» del pescado azul mantiene a la lonja de Torrevieja como uno de los principales mercados de venta de pescado azul a mayoristas y restauradores del levante. Además retiene en su puerto, de forma casi continuada desde hace año y medio, a una flota de unas veinte embarcaciones procedentes de Andalucía, Murcia y la Comunidad Valenciana. Solo como ejemplo, en lo que va de semana la lonja pesquera ha facturado más de 70.000 euros en ventas de subasta a la baja, protagonizadas por el boquerón y la sardina, pero también por primera vez este año «han entrado» en la comercialización bacoreta y melva, dos especies muy similares al atún. El lunes, la flota de cerco desembarcó 2.150 cajas de melvas con un valor en el mercado mayorista de 9,50 euros la caja - con capacidad para unos 12 kilos-. La flota puso a la venta también 2.870 con un precio de venta de 1,30 euros el kilo, además de 1.848 cajas, que alcanzaron un precio de hasta 16 euros la unidad, según la información que facilita la Cofradía de Pescadores. Ayer martes, las capturas continuaron, sobre todo con la captura de sardina. Los pesqueros capturaron 1.800 cajas de esta especie de pescado azul (con un valor de venta de 40 euros la caja de 13 kilos ), 400 de boquerón y unos doscientos kilos de bacoreta. Precios, que sin embargo, apenas cubren los costes de la actividad de cada embarcación.

Un negocio de 6,6 millones

En los primeros cinco meses del año la lonja han movido 1.300 toneladas de pescado, que han alcanzado un valor de venta de 2,4 millones de euros, manteniendo además el ritmo de actividad frenético que se inició en el ejercicio anterior. Una racha insólita y totalmente impredecible. Las migraciones de sardinas y boquerón, especie ésta última casi desaparecida en la década pasada, son un misterio para los científicos y para los propios pescadores, que conocen por experiencia que cuando obtienen esas capturas, a esos cardúmenes les siguen sus grandes depredadores a lo largo del litoral. El pasado año 2013, el volumen de facturación de los pesqueros a compradores, superó los 6,6 millones de euros. El sector, genera empleo fijo en la zona a unas 200 personas. La mayoría de los pesqueros proceden de otras comunidades y sus tripulantes regresan cada fin de semana a sus puntos de origen. En esa cifra se incluye a los operarios encargados de preparar el pescado para su venta y carga en los grandes camiones, que acuden a diario a las instalaciones portuarias. Mercadona se abastece sus centros de Alicante y Murcia con pescado de Torrevieja.

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