La titular del Juzgado 4 que investiga supuestas irregularidades en el trámite de las denuncias de tráfico en Torrevieja ha llamado a declarar como testigos hoy a los tres policías locales que pusieron en conocimiento de Fiscalía esos hechos. Los agentes aseguran que multaron a una vecina por saltarse una señal de «stop» el 30 de noviembre de 2011 y la sanción no llegó a tramitarse en Suma. Según los denunciantes, la conductora llegó a indicarles que la tramitación no iba a tener éxito porque ella era conocida de un mando de la Policía, en concreto, de un inspector. El juzgado llamó a declarar a ese mando, implicado en otras causas, y al policía responsable de la instrucción de las sanciones como imputados, mientras que lo hicieron como testigos el intendente principal, la edil de Seguridad, Agustina Esteve y el concejal Eduardo Gil Rebollo. Los denunciantes y otros agentes de la Policía llevan años exigiendo conocer el paradero de algunas de las denuncias que realizan en la calle ante la sospecha de que no se tramitan, en un derecho que tienen reconocido legalmente y que no han podido hacer valer hasta la fecha.
Los agentes, que se ratificarán hoy en los hechos denunciados y quieren ampliarla, califican de «lamentable» que tengan que ser ellos los que recurran a las autoridades judiciales por, aseguran, «la arbitrariedad con la cual los responsables policiales y políticos aplican las normas». Hasta que comenzó esta investigación, en octubre de 2013, la Jefatura carecía de un registro para llevar control de las denuncias que se entregan para su tramitación. Los agentes las depositaban en un buzón situado en el sótano bajo custodia del personal del departamento que las gestionaba que, en el momento en el que se produjeron los hechos, era responsabilidad del mando que citó la conductora y quien también habría sido el encargado de darle tramitarla. Las denuncias tenían registro de salida ante Suma o la Jefatura Provincial de Tráfico, pero no de entrada. Al albergar los denunciantes «dudas razonables» de que la sanción pudiera no llegar a tramitarse, se registró también a través de un oficio ante la ventanilla única municipal. Semanas después e identificándose como policía, uno de ellos se puso en contacto con la oficina de Suma para indagar si la multa había llegado al organismo recaudador. Y allí le confirmaron que no tenían constancia de su existencia y se negaron a facilitarle más datos.
Investigación interna
Los agentes explican que tras su denuncia comenzaron a sufrir de forma «"casual" un seguimiento selectivo de su trabajo diario, cambiando sus turnos sin explicaciones, además de otros gravísimos hechos» que también han puesto en conocimiento de la autoridad judicial. Estos policías consideran, en declaraciones a INFORMACIÓN, «una auténtica aberración que la edil Esteve se preocupe en investigar a los agentes de Policía encargados del cumplimiento de las normas, en lugar de investigar por ejemplo quién es el responsable de que la tramitación de "alguna" denuncia se quede en el camino, así como quien autorizó y miró hacia otro lado, la instalación de terrazas prohibidas», entre otros hechos.
