La víctima de catorce años de una violación en grupo por parte de compañeros de instituto en la Marina Alta pidió ayer a la Audiencia de Alicante que agravara la condena para los cuatro jóvenes implicados en los hechos. La Sección Tercera de la Audiencia celebró ayer una vista para resolver los recursos contra la sentencia después de que un juzgado de Menores les impusiera penas de entre dos y tres años de internamiento en un centro y una indemnización de 12.000 euros. Tanto la Fiscalía como la acusación particular que ejerce en nombre de la víctima la letrada Mónica Mas Franqueza pidieron penas más severas, mientras que las defensas reclaman que se revoque la condena. Todos los implicados en los hechos son menores de edad.

La letrada de la joven violada exige también una indemnización mayor dadas las secuelas psicológicas sufridas y que sería de 100.000 euros, a abonar subsidiariamente por los padres de los acusados. La vista se celebró ayer a puerta cerrada, donde las partes expusieron sus argumentos para recurrir la sentencia del juzgado de Menores.

Tres acusados internados

Aunque la sentencia del juzgado de Menores se dictó el pasado mes de octubre, la Audiencia ha agilizado su celebración, ya que este fin de semana termina el plazo máximo de internamiento preventivo, por lo que está previsto que la sala resuelva en los próximos días estos recursos a fin de que cumplan la condena con sentencia firme. Tres de ellos están internados en un centro de menores desde finales del pasado marzo, cuando los hechos salieron a la luz y el cuarto está libre.

La joven denunció haber sido violada por tres compañeros de instituto en un descampado en la Marina Alta durante julio de 2018, mientras un cuarto realizaba labores de vigilancia. Los agresores condenados además grabaron un vídeo de los hechos y durante varios meses trataron de extorsionarla reclamando dinero para no difundirlo. La juez de Menores impuso en la sentencia tres años de internamiento para el cabecilla del grupo, dos años y medio para los otros dos que intervinieron en la agresión sexual y dos años para el cooperador necesario.

La abogada de la acusación particular reclamó que cada uno de ellos sea condenado a cinco años de internamiento en un centro de menores ante la gravedad de los hechos, así como que se eleve la cuantía de la indemnización de 12.000 euros. Una cuantía que se justifica por los daños morales y las secuelas psicológicas sufridas a raíz de la violación. La Fiscalía, que se ha adherido al recurso de la acusación, también ha pedido penas superiores, pero no se ha pronunciado sobre las indemnizaciones reclamadas por la joven violada.

Desde la acusación particular se ha incidido en que la agresión sexual estuvo planificada: llevaron a la víctima a un sitio lejano y apartado del casco urbano, hablando entre ellos de lo que iban a hacer sin que ésta pudiera entender lo que decían. La letrada considera que una vez en el lugar de los hechos, el que está considerado cooperador necesario en los hechos es quien empujó a la chica a la zanja y también llegó a tocarle los pechos, motivo por el que considera que la pena que debería imponérsele es la misma que para el resto.

Por su parte, las defensas han incidido en las presuntas contradicciones de la víctima en el momento en que hace un primer relato al personal del centro sobre lo ocurrido y los hechos que denunció después.