La Policía Nacional ha detenido por tráfico de drogas a los dueños de uno de los últimos tigres albinos del mundo en El Rebolledo, informó ayer la Comisaría de Alicante. Los agentes se incautaron de más de cien gramos de cocaína y un centenar de plantas de marihuana tras el registro en el chalé. El pasado fin de semana saltaba a la luz que el Ayuntamiento de Alicante estaba investigando la procedencia y legalidad del felino, uno de los cerca de veinte ejemplares que quedan en todo el mundo, y que se encontraba enjaulado en un chalé en la citada partida alicantina. La Policía llevaba detrás de esta pareja desde mediados del pasado verano, ante las sospechas de que desde el inmueble podían estar distribuyéndose sustancias estupefacientes. Al hacerse pública la investigación por el tigre, la operación policial tuvo que precipitarse, ante el temor de que los implicados pudieran hacer desaparecer la droga.

Por este motivo, agentes adscritos al Grupo de Policía Judicial de la Comisaría Norte junto con el Grupo Operativo de Respuesta (GOR) procedieron a la detención de la pareja y al posterior registro del chalé. En el momento del arresto, se encontró a uno de ellos dinero y varias dosis de cocaína, listas para su venta y distribución.

Al entrar en el chalé, los agentes corroboraron los indicios recabados durante los meses de vigilancia a la finca, tanto de la droga, como de la presencia de armas, como del tigre albino que estaba en una jaula dentro del recinto. En el registro se constató que los detenidos tenían varias habitaciones preparadas para la plantación de marihuana. Una de ellas con más de un centenar de plantas, focos y un sistema de riego. En otra, había restos de otra plantación indoor que ya habían recogido. La Policía considera que los arrestados realizaban plantaciones alternas en el tiempo para poder tener siempre marihuana lista para su venta.

Los agentes intervinieron 120 gramos de cocaína, junto a básculas y otros utensilios para venderla. En lugares ocultos de la casa, se hallaron un fusil calibre 308 Winchester, una escopeta calibre 12, una carabina, una escopeta de aire comprimido, cartuchos, miras telescópicas y un chaleco antibalas. Tras el registro, los agentes custodiaron la vivienda para que el tigre albino no quedara en desamparo hasta la llegada de un familiar de los detenidos que se hizo cargo del mismo.