Una plaga de pulgas, garrapatas y hasta arañas mantiene asolado al cuartel de la Guardia Civil de Sant Joan, según denunció ayer la Asociación Nueva Coproper (ANC) de la Benemérita. Al parecer, el foco infeccioso se encuentra en el descampado donde aparcan los coches oficiales, en cuyas proximidades hay viviendas marginales en las que se acumulan todo tipo de basuras y animales de granja. Desde hace semanas, los agentes sufren todo tipo de picaduras todo tipo de picaduras cuando suben a los vehículos. Pese a que se han fumigado algunos, la medida apenas está siendo efectiva, ya que los agentes utilizan indistintamente aquellos que ya han sido limpiados como los que no, con lo que los parásitos se van cambiando.
Primero empezaron con picaduras de pulgas, pero la situación se ha ido agravando y cada vez va a más. Desde la ANC, su portavoz, Manuel Martínez, denunció que días atrás uno de los agentes se tuvo que quitar una garrapata de una pierna y recientemente otro precisó de asistencia médica en una clínica de Alicante tras presentar picaduras de araña en la espalda y en las mamas. La preocupación entre los agentes se va extendiendo por el temor de que los parásitos lleguen a las viviendas donde hay mujeres embrazadas y niños.
Desde hace años, los agentes aparcan sus vehículos oficiales en un descampado particular que les cedió un vecino. El solar está próximo a otro donde hay varias viviendas marginales, en los que se acumulan las bolsas de basura, combinado con animales de granja, como pavos, cerdos y cabras. Las bolsas de basura han empezado a llegar al descampado donde se encuentran estacionados los coches de la Benemérita y se sospecha que ésta puede ser la fuente de los problemas denunciados.
El Ayuntamiento de Sant Joan desbrozó recientemente el descampado y el pasado fin de semana ya se habían fumigado tres vehículos. Pero a pesar de estas medidas, los problemas de picaduras siguen yendo a más, por lo que hay temor a que el foco de la infección pueda encontrarse ahora en otro lugar.
