Las penurias del cuartel de la Guardia Civil de Sant Joan d'Alacant se arrastran desde hace años y todo parece que continuarán de forma indeterminada porque el proyectado nuevo acuartelamiento sigue paralizado por falta de presupuesto. Si hace un mes se registró un problema por la presencia de roedores en el cuartel, en los últimos días al menos cinco guardias civiles han sido víctimas de picaduras de pulgas mientras desempeñaban su trabajo en el llamado cuarto de puertas, donde los agentes controlan el acceso a las dependencias del Instituto Armado y reciben a los ciudadanos.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Alicante denunció ayer que no se puede tolerar que por la crisis no se realicen de forma adecuada las labores de mantenimiento, ya que los agentes "deben realizar su trabajo con las máximas condiciones de salubridad".

La última oleada de insectos que han picado a los agentes comenzó a detectarse a finales de la semana pasada y la teniente responsable del cuartel de Sant Joan alertó de los hechos el pasado lunes a la Comandancia de Alicante con el fin de requerir una urgente desinfección. La respuesta a la petición fue rápida porque ayer por la mañana se realizó una desinfección del cuarto y quedó clausurado durante un periodo de 12 horas.

Uno de los afectados requirió asistencia sanitaria porque presentaba unas 25 picaduras, según indicaron fuentes de la AUGC, que además añadieron que el problema no solo lo han sufrido los guardias civiles en el cuartel, sino que en algún caso también se ha extendido a sus familiares en sus respectivos domicilios "porque los padres se los han pegado a sus hijos".

Más picaduras

Además de los cinco agentes afectados que prestan servicio en el cuarto de puertas hay otros guardias civiles que también sufrieron picaduras sin que lo hubieran relacionado con la infección ya que no se alertó a toda la plantilla de la presencia de pulgas.

La AUGC reclama una desinfección en condiciones para acabar con este problema de pulgas en el cuartel de Sant Joan y no re alizar una "simple fumigación", ya que en mayo o junio ya se registró otro episodio de picaduras y han reaparecido de nuevo en el mismo lugar. "Hay que preservar la salud e higiene de los agentes", indicaron desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles.