Íñigo Errejón ya ha encontrado un aliado en su expansión territorial. Compromís decidió ayer presentarse a las elecciones generales previstas el 10 de noviembre en una coalición con el partido Más Madrid, creado por el que fuera fundador de Podemos y que hace unos meses rompió con la formación de Pablo Iglesias para comenzar su carrera política en solitario. Compromís y Más Madrid son los dos pilares de una plataforma territorial que se quiere ampliar en los próximos días a otras regiones españolas. Se ofrecerá, en el caso de la Comunidad, incluso que se sume Podemos para guardar las formas. Pero el camino está marcado y Compromís intenta marcar perfil en la campaña electoral en la que peor se siente. De alguna manera, toma aire para salir mejor parado de estos comicios.
Después de una larga jornada de llamadas y contactos a dos y tres bandas, la comisión ejecutiva de Compromís reunida ayer en València adoptó un acuerdo que venía refrendado, previamente, por las ejecutivas del Bloc e Iniciativa. Así que antes de comenzar esta reunión decisiva la solución estaba prácticamente tomado. A medida que pasaban las horas los dirigentes de Compromís, especialmente los de sus dos principales patas, estuvieron fraguando un acuerdo con el que la nueva formación quiere ser fundamental para formar parte de una solución de gobierno en Madrid.
Tras varias horas de reuniones y contactos, tanto en Madrid como en la capital del Turia entre dirigentes de Compromís, Podemos y Más Madrid salió una postura casi mayoritaria antes de comenzar la reunión de la dirección de la coalición. Tanto Podemos como Más Madrid se disputaban el pacto con Compromís, una formación que ya tiene un diputado en el Congreso, Joan Baldoví, conocido ampliamente por su labor en la Cámara Baja. Pablo Iglesias comenzó el día 23, marcado en el calendario como la fecha que se disolvían las Cortes, reconociendo que ya había hablando con la vicepresidenta y coportavoz de Compromís, Mónica Oltra, para llegar a un acuerdo y presentar una lista conjunta para estos nuevos comicios. El líder podemita insinuó que «no estaban lejos del acuerdo», y de hecho, llegó a ofrecer todo tipo de posibilidades durante toda la jornada, pero su intento tuvo poco eco.
De cara a la galería, la vicepresidenta defendió durante unas horas una solución idílica de una «gran plataforma de izquierdas» con la que frenar «la amenaza de las derechas». Una gran «entente cordiale» donde debían presentarse juntos a los comicios Compromís, Podemos y Más Madrid, estos dos últimos, enemigos irreconciliables en la actualidad. Pero este «equilibrio deseable» ayer no fue posible y aunque se ofrecerá a Podemos entrar en la coalición que ya han acordado Compromís y Más Madrid, la líder de Compromís también validó la alternativa que para Joan Baldoví y una inmensa mayoría de dirigentes de la coalición de izquierdas, era la primera y, casi, única opción.
Para el portavoz en el Congreso, no había dudas una vez que se había descartado ir en solitario. De forma clara y rotunda mantuvo durante todo el día que presentarse a las elecciones generales del 10 de noviembre en coalición con Más Madrid era la mejor opción para Compromís por la ilusión que genera una alternativa novedosa, que ha participado en un acuerdo de Gobierno fracasado y que, por tanto, no ha sufrido el condicionante del «desencanto» que en estos momentos se le cuelga a Podemos. Errejón ha trasladado en conversaciones que su papel puede ser de gran ayuda, especialmente, en Alicante. Horas después, Baldoví, la voz de Compromís en Madrid, conseguía que su apuesta de aliado electoral cuajara. Las bases de Compromís y las de Más Madrid tendrán que ratificar el acuerdo durante esta semana.
Efecto dominó
El valor de este acuerdo en la Comunidad no aseguraba solo un pacto en un «territorio amigo» para Más Madrid, sino que puede desencadenar toda una corriente a favor de más apoyos. O lo que es lo mismo, una serie de rechazos a presentarse de nuevo a las urnas de la mano de Pablo Iglesias. Los ecologistas de Equo, Andalucía, Baleares, Cataluña y Galicia están pendientes de otra posible coalición con fuerzas que en su día estuvieron vinculadas a Podemos y ahora caminan por libre. Y la decisión de Compromís puede decantar la balanza.
De momento, el acuerdo es más de concepto que de personas, sobre todo porque los seguidores de Íñigo Errejón en la Comunidad Valenciana o siguen perteneciendo a Podemos o se han apartado de la política, como Antonio Montiel. Las listas electorales seguirán siendo controladas por Compromís aunque no se descartan incorporaciones como refuerzo. Y otro punto de conflicto será dentro del propio Consell, donde Compromís se sentará a gobernar estos dos meses con un partido con el que disputará miles de votos el próximo 10 de noviembre.
Més Compromís como posible marca electoral y pendientes del número uno de Alicante
De Más Madrid a Més Compromís. Esta es la marca electoral que se baraja como probable para la nueva confluencia en la que se presentarán juntos a las elecciones generales del 10 de noviembre Compromís y el partido liderado por Íñigo Errejón. Todavía a la espera de cerrar los detalles de la coalición que se tiene que firmar antes del domingo, Més Compromís es el nombre electoral que puede generar un mayor consenso, una marca que permite a Compromís no diluirse y que a su vez valencianiza la palabra «Más» con la que Errejón comenzó su carrera política al margen de Podemos. Otro de los asuntos que queda por definir serán los candidatos por las distintas circunscripciones. En el caso de Valencia, hay muy pocas dudas al respecto de que será su portavoz en el Congreso, Joan Baldoví quien repita como número uno, aunque se busca una mujer como número dos. En la provincia de Alicante hay que confirmar que Ignasi Candela vuelve a ser el cabeza de lista.
